La mayoría de las aragonesas con familias monoparentales sienten discriminación laboral

El 79% de las mujeres aragonesas que encabezan familias monoparentales siente discriminación laboral, tanto en su acceso al empleo, como en las menores oportunidades de desarrollo y promoción dentro del mismo, según se refleja en el II Informe mujeres con responsabilidades familiares no compartidas y empleo.

Este estudio ha sido dado a conocer por la Fundación Adecco y está basado en una encuesta a 800 mujeres que encabezan familias monoparentales, de las que 80 son de Aragón, ha informado la citada entidad en un comunicado.

Las familias monoparentales son aquellas en las que un solo progenitor es responsable único de sus hijos y existen aproximadamente 548.600 en España, encabezadas por mujeres en casi 9 de cada 10 casos, el 88,6 por ciento, y el 11,4 por ciento por hombres, según el Instituto de la Mujer. En la última década, se ha producido un incremento de un 78 por ciento de estas familias.

El 75 por ciento de las encuestadas cree que sus oportunidades de acceder al mercado laboral, es decir, de superar un proceso de selección, se ven mermadas por su condición de madre sola. Además, el 60,5 por ciento resalta la ausencia de políticas de conciliación en el seno de las empresas, al no existir medidas suficientes que les permitan compaginar su empleo con el cuidado de sus hijos.

Igualmente, el 45,4 por ciento afirma sentir discriminación en su desarrollo profesional al no tener las mismas oportunidades de promoción que los demás y el 21 por ciento señala el salario como factor de discriminación.

La directora de operaciones de la Fundación Adecco, Arancha Jiménez, ha opinado que, "a pesar de que se está avanzando mucho en este terreno, el estigma social de las madres solas es aún muy fuerte y se siguen observando prejuicios y falsas creencias en el seno de las empresas".

Ha añadido que "hay una tendencia a creer que su compromiso con la organización será menor y esto está muy alejado de la realidad, es solo temor, miedo a la desconocido, ya que son personas que desean trabajar y aportan fidelidad, estabilidad y motivación, valores que se convierten en garantía de éxito en el desempeño del puesto".

Trabajo a tiempo parcial 

Un 60 por ciento de las encuestadas en Aragón tiene preferencia por trabajar a tiempo parcial. Frente a ellas, un 40 por ciento prefiere estar ocupada a tiempo completo, pues necesita mayores ingresos. Sin embargo, muchas de estas últimas destacan contar con el apoyo de familiares para hacerse cargo de sus hijos mientras se encuentran trabajando.

Según Arancha Jiménez, "aún tiene que producirse un cambio de mentalidad" y "hay que convencerse de que la conciliación no va en detrimento de la productividad, sino que permite a las personas sacar lo mejor de sí mismas".

El perfil de la familia monoparental es la compuesta por una mujer separada, entre 41 y 45 años, con un hijo y estudios elementales. El 53,2 por ciento de las encuestadas es "madre sola" a raíz de una separación de su pareja, tras la cual ellas han asumido el cuidado y educación de sus hijos.

También destacan las madres solteras (37,7 por ciento), seguidas de las casadas y de las divorciadas (con un 3,9 por ciento cada una). Por último, un 1,3 por ciento es viuda.

Un 40%, en paro 

El 40 por ciento de las encuestadas se encuentra en paro y el 60 por ciento tiene trabajo, aunque de estas el 14 por ciento apunta que este empleo es de 'días sueltos' y que no le permite afrontar todos sus gastos.

En cuanto al tiempo que llevan sin trabajo en el caso de las desempleadas, el 55 por ciento son paradas de larga duración, es decir, supera los 12 meses sin empleo, seguido de un 28 por ciento que lleva de uno a 6 meses sin trabajo; un 10,3 por ciento que lleva menos de un mes y, por último, un 6,7 por ciento está buscando empleo desde hace 7-12 meses.

Del total de las mujeres encuestadas, un 77 por ciento afirma encontrar dificultades para llegar a fin de mes. En este sentido, compartir la vivienda se ha convertido en una opción interesante para ellas y el 30,4 por ciento de las encuestadas se acoge a esta modalidad y vive con sus padres u otros familiares, amigos e, incluso, otras familias en la misma situación.

Frente a ellas, un 69,6 por ciento vive sola con sus hijos, la mayoría de alquiler (45 por ciento), seguidas de un 24,6 por ciento que tiene pagar hipoteca. La opción de alquiler se antoja más interesante para la mayoría de ellas, "debido a los inasumibles precios de adquirir una vivienda propia".