Aragón

Casi 8.000 aragoneses en paro no han trabajado nunca

La mayoría son jóvenes que se acaban de incorporar al mercado y mujeres que se hasta ahora se ocupaban de las tareas domésticas. Son prácticamente el doble que en 2008.

​El paro en Aragón sube en 2.843 personas en octubre
Casi 8.000 aragoneses en paro no han trabajado nunca
G. MESTRE

Una o varias carreras universitarias, el máster de rigor, varios títulos que acreditan el conocimiento de idiomas y una nutrida experiencia en el sector. Este es el contenido de los miles de currículums que a diario llegan a los departamentos de recursos humanos de empresas españolas. Solo unos pocos pasan el corte, y muchos menos se traducen en una llamada.


En un instante tan complicado en el plano laboral para quienes han podido aprender un empleo desde la experiencia, resulta sencillo imaginar las dificultades para obtener un empleo de aquellos que jamás han rubricado un contrato laboral. Al menos 7.958 aragoneses se encuentran actualmente en esta situación, lo que supone prácticamente el doble que en 2008, cuando a duras penas superaban los 3.800.


Se trata de una cifra elevada, aunque inferior a la real, ya que contabiliza únicamente a aquellos que se encuentran inscritos como demandantes de empleo, algo a lo que un buen puñado de parados sin derecho a prestación ya han renunciado. Dentro de la cifra total, la mayoría (5.192) corresponde a mujeres.


Atendiendo a la edad, los menores de 25 años suponen casi la mitad (47,58%). Según los datos del Ministerio de Empleo, el número de parados sin empleo anterior de entre 30 y 44 años es el que menos ha aumentado (50%) desde el inicio de la crisis.


Uno de los grupos con mayor índice de paro corresponde a las mujeres de entre 35 y 49 años. Muchas de estas demandantes de empleo se enfrentan por primera vez al reto de encontrar un trabajo remunerado después de haber pasado buena parte de su vida realizando labores domésticas, que no están amparadas por la Seguridad Social.


Se trata de un perfil que se ha lanzado a la búsqueda de empleo una vez arrancó la crisis y su economía familiar se vio trastocada. No en vano, desde 2008 más de 23.000 amas de casa han empezado a percibir mensualmente una nómina, según los datos del último Informe del Perfil de la Mujer Trabajadora elaborado por la Fundación Adecco. La mayoría han encontrado acomodo en el sector servicios.


El 'handicap' de la falta de experiencia


Otro de los grupos con una tasa alta de desempleo es el de los jóvenes, tanto hombres como mujeres, de entre 20 y 29 años. Es decir, chicos y chicas que han completado sus estudios y que, desde entonces, no han encontrado un puesto de trabajo.


En esta situación se encuentra José Antonio Rojí, arquitecto técnico zaragozano de 26 años que desde que acabó la carrera hace casi dos años no ha podido obtener un empleo. "Es lo que hay. Es prácticamente imposible encontrar trabajo de lo tuyo. Nuestra generación ya está prácticamente resignada a esperar que pase la crisis, reinventarnos o emigrar".


"Lo peor de todo -lamenta José Antonio- es que en todos los sitios piden experiencia, pero a este ritmo nunca vamos a conseguirla. Ni en las áreas en las que nos hemos formado ni en ninguna otra. He echado un montón de currículums para trabajos en los que no se necesita cualificación y sólo me han llamado de dos, aunque al final no me han seleccionado".