El portavoz del grupo parlamentario de IU de las Cortes de Aragón, Adolfo Barrena, ha solicitado la comparecencia de la consejera de Educación, Universidad, Cultura y Deportes, Dolores Serrat, en sede parlamentaria para que dé cuenta de la política de becas que va a llevar a cabo el próximo curso en la Enseñanza pública. Barrena valora la posibilidad de solicitar la celebración de un Pleno extraordinario.

Se ha producido un "nuevo ataque no solo a la escuela pública, sino especialmente a la gente, las familias que tienen hijos en edad escolar" con dificultades económicas y también las que necesitan usar el transporte escolar, ha afirmado en rueda de prensa.

Barrena ha apuntado que el Departamento no va a conceder becas, es decir, "la subvención total del servicio", sino "ayudas" que alcanzarán como máximo el 80 por ciento de la cuantía total, de tal forma que la ayuda máxima podría alcanzar los 90 euros por persona.

Ha lamentado el "cinismo" del Gobierno en esta materia porque el Departamento se ha comprometido con las personas y grupos en situaciones desfavorables, pero -como norma- los únicos beneficiarios de estas ayudas serán los que cobren como máximo 533 euros, el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM).

"Aquella familia que supere los 533 euros ya no puede pedir una ayuda para el comedor escolar", ha dicho Barrena, matizando que si es una familia numerosa especial, con al menos tres hijos o dos con uno de ellos discapacitado, cobrarán las ayudas si cobran como máximo 590 euros. Las familias que cobren el ingreso aragonés de inserción (IAI), fijado en 615 euros, también lo podrán cobrar, ha agregado.

El portavoz de IU ha criticado, asimismo, que la partida para becas de comedor bajará de seis a cuatro millones de euros el año próximo y ha puesto de relieve que este año se han quedado sin beca 10.918 escolares.

Ha comentado además Barrena que las familias de los escolares del medio rural que no pueden utilizar una ruta de transporte colectivo "se tienen que apañar con 450 euros al año cueste el servicio lo que cueste, tengan o no tengan coche o carnet de conducir las familias".

Esta política la hace un Gobierno al que "se le llena la boca siempre" sobre la vertebración del territorio y su preocupación por el medio rural, pero ha causado dificultades a parte de la ciudadanía, ha concluido Barrena.