Conflicto lingüístico

Un 5 % de los aragoneses pasan a hablar Lengua Aragonesa propia del Aragón Oriental en lugar de catalán

Con la aprobación de la nueva ley de lenguas la derivación del catalán que se hablaba en algunos pueblos de la zona oriental pasará a llamarse Lapao.

Aragón ha excluido de sus lenguas propias el catalán y ha provocado que el 5% de la población aragonesa que se servía de esta lengua en su vida cotidiana pase a hablar Lapao, siglas de Lengua Aragonesa propia del Aragón Oriental.


La nueva ley del Gobierno aragonés aprobada por el parlamento autonómico de la Comunidad que ha suscitado las más diversas críticas de la práctica totalidad de las fuerzas políticas catalanas.


Y es que desde ahora, y en virtud de un acuerdo plenario aprobado por las Cortes de Aragón, para estos aragoneses, vecinos de poblaciones limítrofes con Cataluña, su vehículo de comunicación es el Lapao.


La denominada Ley de Uso, Protección y Promoción de las Lenguas y Modalidades Lingüísticas Propias, aprobada con los votos de la coalición de gobierno formada por el PP y el Partido Aragonés y rechazada por los grupos de oposición, elimina la normalización del uso del catalán en la Comunidad.


Esta ley ha llegado al Parlamento aragonés seguida de una amplia polémica que se inició días atrás y a la que se han sumado los partidos políticos catalanistas y sus dirigentes, entre ellos el presidente de la Generalitat, Artur Mas, que se sirvió de la ironía para decir que él entendía "perfectamente" el lapao.


Polémica que se ha trasladado a las Cortes de Aragón, donde una veintena de miembros de la plataforma "No hablamos catalán", aragoneses partidarios de la iniciativa legislativa, han aplaudido las intervenciones de los portavoces de los grupos impulsores de la iniciativa.


Mientras tanto, un grupo de jóvenes de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) se manifestaba a las puertas del parlamento cubriendo sus bocas con esparadrapo.

Una ley "para unir más" Aragón


Desde el Partido Popular en Aragón se asegura que con la nueva ley se pretende proteger los "intereses" de los aragoneses, y en especial de ese 5 % de población que no habla castellano sino que se sirven de expresiones sociales y culturales propias.


Así lo han entendido al coordinadora de la ponencia de la ley de lenguas, María José Ferrando (PP), y la diputada del PAR María Herrero, para quien esta nueva ley "no fractura a Aragón en dos bloques, como sí hacía la anterior", que, a su juicio, "nació mal y mal creció".


Esto ha llevado a la elaboración de un texto legal que considera como lenguas propias el ya referido Lapao y el Lapapyp (Lengua Aragonesa propia del Pirineo y del Prepirineo), lo que antes eran el catalán y el aragonés.


Los argumentos de la coalición de gobierno no son compartidos desde los grupos de la oposición, para quienes la iniciativa es "ridícula" y carente de rigor académico.


La propia portavoz de Chunta Aragonesista (CHA), Nieves Ibeas, ha iniciado su intervención en el plenario en castellano, aragonés y catalán para evidenciar, a su juicio, la realidad trilingüe de Aragón.


Sin embargo, a esta polémica no se ha sumado aún la comunidad científica y lingüística ni expertos que se hayan pronunciado para avalar o desacreditar la decisión adoptada por las Cortes de Aragón, por lo que el debate sigue circunscrito al ámbito político.