La consejera de Educación, Universidad, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón, Dolores Serrat, sostiene que su Departamento hace lo posible para "seguir garantizando" la educación pública. 

En declaraciones a los medios de comunicación, este jueves, antes de entrar a la reunión con los equipos directivos de los centros educativos de la provincia de Zaragoza, insistió en que con los ajustes se ha buscado "la mejor opción posible" para garantizar "la prestación del servicio público".

La reunión, que se celebró en el Conservatorio Superior de Música de Aragón, se enmarca dentro de la ronda de contactos que la consejera está manteniendo a lo largo de esta semana con los directores de los colegios e institutos de las tres provincias para abordar el inicio del curso escolar 2012-2013.

En dicho encuentro, la consejera fue recibida por gritos de "fuera" de un grupo de gente, pertenecientes al movimiento 'Marea Verde', que la esperaban en la entrada principal del Conservatorio.

"Estas reuniones hay que enmarcarlas dentro de lo que debe ser normal en la Administración educativa, que nos reunamos a principio de curso. Esto debería ser necesario siempre, pero mucho más en un año que empieza con novedades y con dificultades", explicó la consejera.

De esta forma, reconoció que el curso pasado finalizó con "muchísimas movilizaciones, protestas y descontento" y que empieza "en un clima de descontento importante y de preocupación".

"Soy consciente, y no lo he negado en ningún momento, de que durante el curso pasado tuvimos que tomar una serie de decisiones que ni sirven de gusto, ni de orgullo, ni son deseadas por nadie, pero que son absolutamente necesarias dentro de la coyuntura económica que nos encontramos", recalcó Serrat.

Esto es lo que la consejera transmitió este jueves a los directivos de los centros zaragozanos y aseguró que comprende "los descontentos" y las movilizaciones, "siempre que estas no se transformen en disturbios", pero añadió: "Como Administración lo que tenemos que anteponer es la prestación del servicio". En este punto, resaltó que espera que los directores y "todos" sean capaces de "anteponer el interés general a cualquier otro tipo de interés".

Fotografía de la situación

La consejera Dolores Serrat incidió en que en la reunión no se trataba de explicar las medidas, sino de "hacer una fotografía de la situación de la educación en Aragón en este principio de curso". Así,  apuntó que los directores conocen "muy bien" la realidad en su centro, pero es "importante" que también "conozcan la de la educación en la Comunidad autónoma".

Serrat también animó a los directores a "seguir apostando por el futuro de los niños y de los jóvenes en esta situación de dificultad", pero les intentó trasladar "un mensaje de esperanza".

"Sigo confiando en la madurez de la sociedad española, creo en la democracia, pero, sobre todo, creo en la capacidad y en la profesionalidad, tanto de los equipos directivos como de los docentes de nuestra Comunidad, y no puedo hacer otra cosa que agradecerles el esfuerzo que están haciendo, que hicieron el año pasado y que estoy convencida que harán por esa vocación se servicio público", añadió.

Respecto a las protestas de 'Marea Verde', bajo el lema 'En defensa de la escuela pública, no a los recortes en educación', la consejera ha señalado que comprende las movilizaciones y que son "legítimas", pero también ha destacado que espera que no se llegue a una huelga en el sector, dado que si se lleva a cabo, los niños y los jóvenes son "los que van a pagar el daño". Sin embargo, "es un derecho también reconocido en la Constitución y por lo tanto, dentro de lo que son los márgenes del derecho no me corresponde opinar".

Responsables

El director del Instituto de Educación Secundaria 'La Azucarera', Jesús Ángel Sánchez, matizó, antes de entrar a la reunión, que los directores de los centros educativos aragoneses son "responsables".

También subrayó que todos ellos cumplen con sus obligaciones, aunque este curso "difícilmente va a ser normal" y añadió: "Pero no por nosotros, sino por las decisiones que se han tomado tanto en el Gobierno de Madrid, como en el autonómico".

Sánchez afirmó que espera que no haya enfrentamientos entre padres de alumnos y centros por los ajustes y que "asuma cada cual la responsabilidad que tiene". "Yo, como director, lo tengo muy claro, sé que tengo que defender el derecho a la educación y la dignidad de la escuela pública", concluyó.