Sostenibilidad

Servicios ambientales al alcance de las empresas aragonesas

Varias instituciones aragonesas crean un grupo de trabajo para medir los gases de efecto invernadero emitidos por las organizaciones y mejorar su desempeño ambiental.

El Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio, la Universidad San Jorge, la Fundación Empresa y Clima y Cyclus Vitae Solutions han creado un grupo de trabajo que facilitará a las empresas aragonesas el acceso a servicios ambientales "de calidad y alto valor añadido" con entidades "de reconocido prestigio internacional", pudiendo medir así sus impactos ambientales y aplicar medidas para minimizarlos.


Como punto de partida, este grupo de trabajo comenzará a trabajar en la medición de la huella de carbono del vino para su aplicación en bodegas aragonesas. Además del sector agroalimentario, otros sectores como la logística, la construcción o la automoción están trabajando en la incorporación de este tipo de medidas ambientales, ha informado el Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio.


La huella de carbono suma la totalidad de los gases de efecto invernadero emitidos por una organización, evento, actividad o el ciclo de vida de un producto y sirve para determinar su contribución al cambio climático, han indicado las mismas fuentes.


El uso de este indicador facilita la comunicación de un producto a grupos de interés del perfil ambiental, la prospección de nuevos mercados y canales de distribución y venta, la reducción de costes ambientales y económicos de producción, la identificación de las actividades o procesos con mayores emisiones asociadas y la implantación de medidas de reducción sobre ellas, entre otras ventajas.


Dichas organizaciones han comenzado a colaborar para que las empresas puedan incorporar herramientas de Análisis de Ciclo de Vida (ACV) y de medición de la huella de carbono, identificando y cuantificando así sus impactos ambientales y mejorando su desempeño ambiental.


El marco de utilización del ACV viene determinado por las normas ISO 14040. Además de para determinar la huella de carbono, sirve para calcular las declaraciones ambientales de producto y sus resultados son esenciales para llevar a cabo medidas de ecodiseño y ecoinnovación, han apuntado desde el Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio.


Análisis de ciclo de vida


La huella de carbono es un Análisis de Ciclo de Vida en el que únicamente se evalúan las emisiones de los gases que causan efecto invernadero y se expresa en toneladas cantidad (de gramos a toneladas) de CO2 equivalente.


El uso de este indicador de cambio climático se ha extendido con cierta celeridad en los últimos años y, aunque por el momento es voluntario, países de la Unión Europea como Francia ya han regulado la obligatoriedad de comunicar al consumidor las emisiones de gases de efecto invernadero que se liberan en la fabricación y el transporte de productos que se comercialicen en el país. Otros países estudian la aplicación de políticas similares.


El cálculo de la huella de carbono "resulta clave para que las empresas puedan valorar las medidas que deben aplicar para reducir su contribución al cambio climático". Por eso, "apostar por estas mediciones implica un valor diferencial para una organización o producto que, al incorporar medidas innovadoras y respetuosas con el medio ambiente, abre nuevos canales de venta en mercados competitivos", han comentado desde el Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio.