Juego

Los 'corners' de apuestas se duplican en un año en Aragón a pesar de la crisis

La recaudación unificada de las tres empresas que operan en la Comunidad registra un crecimiento del 24%.

Una casa de apuestas en Zaragoza.
Los 'corners' de apuestas se duplican en un año a pesar de la crisis
ASIER ALCORTA

El juego está de moda, también en Aragón. Además de las timbas de póquer o las apuestas a través de portales de internet, cada vez hay mayor presencia de jugadores en los locales que, emulando a las casas de apuestas británicas, crecen como setas por todo el territorio nacional sin notar los efectos de la recesión económica.


En agosto de 2011 existían 64 zonas de juego o 'corners' en Aragón, todas ellas pertenecientes a la firma Sportium, que comenzó a instalarse en la Comunidad cuatro meses antes. Un año más tarde, esta cifra prácticamente se ha duplicado hasta alcanzar los 121 puntos.


Este espectacular crecimiento se explica al entrar en escena Winners -filial de Bwin-, que ha instalado hasta 53 'corners' en el territorio aragonés, y Codere, otra empresa del sector que opera en España bajo el nombre de Victoria. Esta última gestiona tres espacios en la capital aragonesa, uno de ellos en el casino.


Las tres empresas tienen máquinas de apuestas en diferentes locales como bingos, casinos o salas de juego.


No solo ha crecido la presencia de estos espacios en la Comunidad. También lo ha hecho su actividad económica, ya que el volúmen de la recaudación total de estos locales se ha incrementado alrededor del 24% si se comparan los resultados del último semestre de 2011 con los seis primeros meses del presente año.


Estos negocios recibieron un fuerte empujón el pasado mes de junio, cuando entró en vigor la nueva ley de juego que obliga a declarar todos los ingresos obtenidos en las casas de apuestas de internet.


Público latinoamericano


Según explica Esther Aguado, presidenta de la Asociación Aragonesa de Jugadores de Azar en Rehabilitación (Azajer), un gran número de usuarios de estos locales es de origen latinoamericano. También acuden, aunque en menor volumen, jugadores chinos.


Por suerte, la rápida extensión de estos locales no ha propiciado un aumento de las personas que precisan tratamiento por ludopatía. Aguado asegura que este es un problema que atañe a un tipo de jugador menos social, principalmente "chicos de entre 18 y 30 años que apuestan por internet en competiciones deportivas o que juegan al póquer".


Sin embargo, en el seno de Azajer sí han llegado "muchas quejas" alertando de lo sencillo que resulta acceder a este tipo de locales, a los que se puede impedir la entrada si el nombre del jugador está en la base de datos del departamento de Interior de personas con problemas de ludopatía. "En muchas ocasiones no se requiere el DNI a pesar de las inspecciones que realiza la DGA", denuncia Aguado, quien concreta que estos problemas se repiten, especialmente, "en los pueblos de la provincia de Huesca".