"Mis veranos infantiles se parecían mucho a los de ‘Verano azul"

1. ¿Qué hace una cantante en verano?

-Normalmente recorrer la geografía española, o más bien aragonesa, cantando en las semanas culturales de los pueblos. En este año de recortes las semanas culturales han sido atacadas por tribus jíbaras, las cuales han reducido prácticamente a la nada nuestras actuaciones.

2. ¿Dónde veranea?

- Mis vacaciones dependen de las actuaciones. Pero siempre encuentro una semana al año para hacer un viaje. No soy de hábitos fijos, intento conocer siempre sitios nuevos, aunque no me importa repetir algunos.

3. ¿Es de playa, de montaña, de ciudad o de pueblo?

-Soy de todos. Y si pueden ser combinados mejor. Las ciudades europeas me fascinan. Aún más si te permiten mezclar con momentos de montaña o de playa.

De pueblo soy poco la verdad, aunque me encanta esa tradición. Ser de Buenos Aires hace que me pille un poco lejos esa costumbre. Allá uno es más de barrio que de pueblo porque las distancias son enormes y si tu pueblo está a 2.000 kilómetros es difícil ir y volver cada tanto.

4. ¿Qué hace en vacaciones diferente del resto del año?

-Algo que no suelo hacer el resto del año es “hacer nada” y la verdad que me cuesta un par de días adaptarme a eso. Una vez que logro entrar en esa dinámica hago un poco de todo: cocinar, dormir, pasear, jugar, leer aún más y lo que va surgiendo.

5. ¿Cuál ha sido el viaje de verano de su vida?

-Siempre es el último que he hecho o el que me queda por hacer. Pero a decir verdad cada viaje añade su granito de arena. El norte de Argentina es para mí un pequeño paraíso terrenal. Allí viví grandes experiencias. Es un lugar mágico.

6. El verano está asociado a la infancia y a la adolescencia. ¿Cómo ha sido esa época?

Genial. Durante mi infancia veraneábamos en Necochea, una playa de la provincia de Buenos Aires. La verdad es que se parecía mucho a ‘Verano azul’, la serie de TVE. Algo tienen esos veranos que le hacen a uno crecer de una forma más marcada que el resto del año. O igual es que los recuerdos de los veranos quedan guardados en esos baúles llenos de colores que sólo se viven una vez. En la adolescencia recorrí la geografía Argentina de mochilera. Viajábamos a dedo y nuestro medio de transporte era el que nos brindaba la carretera. Recorríamos miles de kilómetros en camiones, coches, furgonetas, etc. Así viajé durante varios años. Nunca volví a sentir esa sensación de libertad tan inmensa.

7. ¿Le marcaron de manera especial la radio o la televisión?

-En verano desaparecen. Es como si nunca hubiesen existido.

8. ¿Qué actividades realiza estos días?

-Mi actividad favorita de vacaciones es el desayuno distendido. Esos que duran al menos una hora acompañado de un periódico, algo que no suelo leer el resto del año.

9. ¿Qué elementos o sensaciones están asociados a un verano inolvidable?

-Más que nada son los olores, los sonidos y los sabores los que se asocian más a esa fecha estival. Los sentidos se agudizan y uno tiene tiempo de saborear a través de ellos los nuevos aires que le rodean. La buena compañía, el paisaje, las brisas de vientos renovados. Mi principal actividad de esos días es relajarme y disfrutar.

10. ¿Cuál ha sido el gran personaje de sus veranos?

-Todos los que me voy cruzando por el camino en los viajes y me dejan nuevas enseñanzas.

11. El verano está asociado a festivales. ¿Sueles ir, hay alguno que te produzca alguna emoción especial?

-Cuando llegué a España (hace ya 15 años), me encontré con un montón de costumbres nuevas que me encantaron. Una de ellas fueron los festivales de verano en medio de la naturaleza. Pirineos Sur fue uno de ellos. Subí durante muchos años. Además en aquella época no lo recuerdo tan masificado o puede ser que a los 20 años uno se adapta mejor a la masa...

12. Si tuviese que resumir el espíritu veraniego en un tuit de 140 caracteres, ¿qué diría?

-Es un tiempo de libertad. Con la sensación de que el reloj desacelera su paso y uno dispone del triple de horas para hacer lo que le da la gana. El verano te da la oportunidad de parar la vorágine del día a día y ver el mundo con otra perspectiva.

13. ¿Cuál es la mejor, la más extraña o sorprendente anécdota veraniega vinculada a tu profesión que haya sucedido en verano?

-Los bolos de los pueblos son siempre sorprendentes. Si uno piensa que lo ha visto todo está muy equivocado... Fuimos a actuar a un pueblo cerca de Zaragoza. Cuando llegamos había un ambiente más bien de festejo que de semana tranquila pero, bueno, como había rancho imaginé que sería la típica actuación durante la cena. Contactamos con la organización, un chico joven nos atiende y nos dice, “os estábamos esperando”, y nos lleva a donde tenemos que actuar. Nos disponemos a montar el equipo. Una nota muy importante: ese año hubo cambio de gobierno en los pueblos. Así fue que en medio del montaje se acerca un hombre y nos dice: “Hola, yo soy el alcalde. ¿A vosotros quién os ha contratado?”. Yo, estupefacta, titubeo el nombre de la persona que me llamó. Y me replica, en un tono... mmm... cómo describirlo... autóctono: “Esa persona ya no vive aquí. Vosotros actuad y después hablamos”. Hicimos la actuación, desmontamos rápidamente. Intenté hablar con el alcalde pero había desaparecido como por arte de magia y el joven que nos había atendido se esfumó como el aire. Así que nos fuimos de allí intentando averiguar si eso había sucedido en realidad o era un sueño del que no había forma de despertar.