Medio ambiente

Millones de almejas asiáticas contra 60 margaritíferas

ANSAR denuncia la rápida expansión de la almeja asiática en el Ebro. Esta especie invasora afecta a otras autóctonas como la margaritífera, especie única en el mundo en peligro de extinción.

Almejas asiáticas en el Ebro, cerca de Remolinos
Millones de almejas asiáticas contra 60 margaritíferas
ISMAEL SANZ

Ismael Sanz, educador ambiental y miembro de ANSAR-VoluntaRíos, mete la mano en el Ebro (en un punto entre Alcalá de Ebro y Remolinos, o en cualquier otro) y saca un par de piedras, restos de algas, dos náyades muertas (almejas autóctonas de agua dulce) y decenas de almejas asiáticas. "El avance de la almeja asiática es impresionante en el Ebro, el Canal y las acequias. Esta especie provoca daños enormes a la fauna autóctona porque compite con otras por el oxígeno y el alimento", afirma Ismael Sanz.


La almeja asiática es un pequeño bivalvo de unos 2,5 o 3 centímetros de longitud. Vive en el fondo del agua, sobre limos y gravas, y tiene una gran capacidad reproductora. "Esta especie invasora se detectó por primera vez en el Canal Imperial hace unos seis años y desde entonces su expansión por el Ebro ha sido rapidísima. Hay millones de almejas asiáticas en el fondo del río. En algunos puntos, como en Remolinos, estas almejas forman una capa de varios centímetros por encima de las gravas", muestra Ismael.


El Departamento de Medio Ambiente vigila su expansión desde hace unos años y hay preocupación por los daños que puedan provocar las almejas asiáticas en las poblaciones de margaritífera auricularia (una de las cuatro especies de almejas de agua dulce autóctonas en Aragón, única en el mundo y en peligro de extinción).


"La almeja asiática está provocando serias afecciones a las últimas margaritíferas que quedan en el Ebro y al resto de las náyades. Se calcula que en Aragón quedan algo más de 4.000 ejemplares de margarífera: unas 60 en el Ebro y 4.000 en el Canal Imperial y en el Canal de Tauste. Se habla de que en Cataluña hay unos 40 o 50 y otros tantos en Francia. Los cambios están siendo rapidísmos. Hace unos 60 años había millones de margaritíferas en el Ebro. En Aragón se cogían para aprovechar el nácar de las conchas. En Sástago había una fábrica que hacía empuñaduras de cuchillos, adornos y collares con el nácar de las almejas", cuenta este educador ambiental.

Origen desconocido

En Aragón viven 44 especies exóticas invasoras, recogidas en un catálogo que presentó el Gobierno central en noviembre de 2011. El catálogo incluye 136 especies en todo el país, que deben ser vigiladas para preservar la supervivencia de las variedades autóctonas.


Entre las especies invasoras más conocidas en Aragón están el mejillón cebra, el siluro, la cotorra argentina, el cangrejo rojo o el galápago de Florida. Algunos de estos animales han sido introducidos en España por pescadores, otros por acuarios, coleccionistas o particulares que los trajeron como mascota.


"La almeja asiática es de origen chino y se desconoce cómo llegó aquí. En China es comestible. Las administraciones están trabajando contra otras especies invasoras, como el mejillón cebra, pero no hay ningún tratamiento específico para la almeja asiática. No sabemos cuál es su límite de expansión", señala Ismael Sanz.


"La pérdida de la dinámica natural de los ríos (por su alta regulación y falta de crecidas) contribuye a la expansión de las especies invasoras, que terminan invadiendo miles de kilómetros de cauce", añade este naturalista.