Historia

Una exposición ensalza el valor de los 'pactos'

'El pacto, seña de identidad aragonesa' se puede visitar en las Cortes de Aragón y coincide con el seiscientos aniversario de la Concordia de Alcañiz y el Compromiso de Caspe.

Las Cortes de Aragón acogen desde este lunes la exposición 'El pacto, seña de identidad aragonesa', una muestra de fondos documentales del Parlamento que recorre la historia de acuerdos y consensos públicos y privados en la comunidad enmarcada en la conmemoración del seiscientos aniversario de la Concordia de Alcañiz y el Compromiso de Caspe.


La muestra, que acogerá la capilla de San Martín hasta octubre, reúne más de un centenar de documentos con un recorrido en torno a tratados y contratos públicos y privados que han sido protagonistas en los últimos siglos de la historia aragonesa.

En la inauguración de la exposición, el presidente de la Cámara, José Ángel Biel, ha insistido en que la muestra tiene como referente básico "el pacto", una seña de identidad de Aragón, como evidencia que en 23 de los 29 años de existencia de las Cortes ha habido gobiernos de coalición.


"Si en algún sitio sabemos lo que es un pacto es precisamente en esta tierra", ha recalcado Biel, quien ha dicho, en tono distendido, que si las grandes fuerzas políticas necesitan hacer un acuerdo para salir de la crisis tienen "una magnífica oportunidad" de hacerlo en el palacio de la Aljafería, sede de las Cortes, donde tanto se entiende de consensos.

Además, ha dicho, la muestra supone un "recordatorio" importante en un año en el que también se cumplen 30 años del Estatuto de Autonomía, cinco del aprobado en 2007 o 20 años del Pacto del Agua.


El hito histórico protagonista de la exposición es el Pacto de Sobrarbe, firmado en 1188, y aunque no se conserva ningún texto íntegro, es un mito en la historia política aragonesa y es mencionado en todas las ediciones de los fueros de Aragón publicadas a partir de mediados del siglo XVI.


Muchos historiadores, afirman las Cortes, defienden que esta firma podría ser el origen de la obligación impuesta a los monarcas para jurar los fueros.


La muestra también incluye documentos relacionados con la Concordia de Alcañiz y el Compromiso de Caspe.

El objetivo es que a través de la documentación expuesta se puedan entrever diferentes pactos de derecho público, con firmas de tratados internacionales, concretados en ocasiones en capitulaciones matrimoniales, pactos sellados por los monarcas aragoneses con diferentes estamentos sociales o acuerdos alcanzados entre diferentes instituciones o en el seno de alguna de ellas.Referencias a pactos históricos

En los documentos expuestos aparecen referencias a lugares en los que se llegó a algún tipo de pacto para alcanzar un compromiso, como Calatayud, Alcañiz o Caspe, mapas históricos o árboles genealógicos, como el de Jaime II de Aragón, con indicación de los aspirantes al trono tras la muerte de Martín I.


También se pueden contemplar ilustraciones, escudos heráldicos de las familias y dinastías que fueron parte en algún pacto e incluso narraciones de los acontecimientos históricos que centran la muestra.


Asimismo, la exposición dedica un apartado especial a la pervivencia del principio "standum est chartae" que, ahondado en sus raíces en los antiguos fueros de Aragón, sigue todavía vigente impregnando el derecho civil aragonés.


La expresión, recogida por primera vez en 1177, en el Fuero de Teruel, significa que el juez, a la hora de dictar sentencia, debe de hacerlo de acuerdo con lo convenido entre las partes en litigio.