Los termómetros nunca suelen dar tregua durante los meses de verano y este 2012 no va a ser menos. Los aragoneses solo se podrán cobijar de las altas temperaturas en el Pirineo y ni eso, porque durante la última semana de junio el calor excesivo también llegará hasta allí. En el resto de Aragón se prevén, durante todo el estío, temperaturas superiores a la media, sobre todo en el sur de la Comunidad Autónoma, donde el mercurio se disparará.

El de 2011 fue un verano irregular: mientras que en julio hubo temperaturas bastante bajas para esa época del año durante las tres primeras semanas, la cuarta hizo excesivo calor y en agosto se mantuvo esa misma tónica. Las precipitaciones brillaron por su ausencia y los termómetros marcaron, de media, 21 grados.

A falta de 20 días para su estreno oficial, Amadeo Uriel, delegado territorial en Aragón de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), ha facilitado algunos datos de cómo será el verano de 2012 en Aragón.

Junio será un mes caluroso. No hay que dejarse engañar por la situación que se dio este lunes cuando, tras un fin de semana de intenso calor y precipitaciones, las temperaturas máximas bajaron de media 10 grados en todo Aragón.

Durante este mes, en el Pirineo las temperaturas se encuadrarán dentro de la normalidad excepto la última semana, cuando el termómetro subirá varios grados. En el resto de la Comunidad Autónoma, las dos primeras semanas de junio serán especialmente secas, mientras que la última mitad del mes puede llegar algún paso frontal, como el que 'visitó' la región el pasado fin de semana, que deje algunas lluvias intensas.

Los meses de julio y agosto serán "normales" en el Pirineo, tanto en temperaturas como en precipitaciones. Es decir: temperaturas que podrán sobrellevarse y alguna que otra tormenta. En el resto de la Comunidad Autónoma, las temperaturas serán superiores a la media normal de esta época del año. "Cuanto más al sur, más calor hará", ha indicado Uriel. Estas temperaturas excesivas se notarán, sobre todo, en la zona de la Ibérica.

En cuanto a las precipitaciones, al verano no se le puede pedir mucho: lloverá poco y, cuando llueva, será en forma de tormentas de verano.

Desde la delegación aragonesa de la Aemet han indicado que es complicado saber con exactitud cómo será el verano porque se trata de un periodo muy largo de tiempo. Por ello, los datos facilitados 'dibujan', a grandes rasgos, el estío que podemos esperar.