Aragón

Las fiestas de los pueblos sobreviven a la crisis

Organizadores de festejos taurinos y representantes de orquestas tienen, en general, menos trabajo que otros años pero capean el temporal económico.

Imagen de las fiestas 2011 de Figueruelas
Las fiestas de los pueblos sobreviven a la crisis
J. M. M.

La crisis aprieta más que nunca a las entidades locales de Aragón y de toda España. Y ahora que se acerca el verano toca hacer números, más números aún para poder organizar las fiestas patronales que la mayoría de las localidades celebran por esta época.


Quienes más sufren la falta de crédito de los ayuntamientos son las empresas de representación de orquestas y los organizadores de eventos taurinos. Al descenso del número de contrataciones, que es habitual desde el año 2009 cuando se empezó a notar la crisis, hay que añadir que, para animar el mercado, los organizadores se han visto obligados a bajar los precios de sus espectáculos, por lo que sus ingresos se han visto afectados.


Además, según varios empresarios, los ayuntamientos esperan ahora hasta el último momento para cerrar las actuaciones, una tendencia que no ayuda nada a que estas empresas vean la salida de la crisis que atraviesan. "Cada vez se va contratando más tarde y no es extraño que casi te llamen de un día para otro", dice Paco Romero, responsable de Producciones Artísticas Atenas.


"El bajón gordo por la crisis fue en 2011, pero este año ha descendido más aún", indica Romero, que añade que casi todos los pueblos han reducido la contratación de orquestas uno o dos días. "Tenemos menos trabajo y peor pagado", se lamenta este representante de orquestas zaragozano.


"Antes, entre marzo y abril, ya teníamos toda la temporada cerrada, ahora esperan a última hora", apunta por su parte José Daniel Guerrero, de Tauroguerrero, empresa organizadora de espectáculos taurinos y de alquiler de plazas de toros portátiles. "Pueblos que montaban plaza para todos los días de fiestas ahora lo montan solo para un par de ellos", refiere Guerrero, que explica que su empresa trabaja por todo Aragón, por Navarra e incluso por Francia, aunque cada vez les llaman menos de fuera. Aun así, no se resigna. "Saldremos adelante", apostilla.


Francisco Murillo explica que su ganadería, la taustana Murillo Conde, está registrando "más o menos" el mismo trabajo que veranos anteriores. "Siempre hay algún pueblo que se te va, pero te llega otro por otro lado. Así que este verano está bastante bien", indica Murillo, que sin embargo ha notado cómo un mismo pueblo contrata menos días de festejos, a pesar de que han ajustado los precios de los espectáculos que ofrecen.


En la empresa turolense Tauroemoción, a pesar de haber reducido sus tarifas en torno a un 15%, están contentos ante el verano que se les plantea. "Este año hemos subido la actividad entre un 30 y un 40% con respecto al año pasado", indica Alberto García, uno de los responsables de la empresa. "Empezamos nuestra actividad en enero de 2009, así que ya arrancamos conociendo la crisis", añade.

Otro inconveniente: la hora de cobrar


"Ahora los ayuntamientos parece que se van a poner al día con el plan de pago a proveedores, pero hemos pasado una época muy mala", dice Paco Romero. "En mi empresa hemos estado cinco meses sin que entrara un euro", se lamenta Romero, que explica que en algunos casos hay consistorios que han tardado 10 meses en pagarle.


"Quitando dos o tres ayuntamientos, en general, se han portado bastante bien", indican desde Tauroguerrero. "Nosotros, antes de firmar un contrato, nos aseguramos que de hay un presupuesto", dice por su parte Alberto García, de Tauroemoción.


Ante la tendencia de contratar los festejos en el último momento, todos los empresarios tienen la ilusión de que las contrataciones aumenten durante este mes de junio y esperan que la temporada veraniega se enderece un poco más de lo que está.