Protestas por los recortes en Educación

Serrat lamenta el "nivel de agresividad y violencia"...

La consejera cree que la situación traspasó "los límites del respeto", aunque reconoce que las medidas de seguridad pudieron suponer "algún trastorno" a los convocados.

Dolores Serrat en el colegio Joaquín Costa
Serrat lamenta el "nivel de agresividad y violencia" de quienes la increparon
OLIVER DUCH

La consejera de Educación, Cultura y Universidad del gobierno de Aragón, Dolores Serrat, ha apostado por el diálogo y el acuerdo para resolver los temas pendientes en el ámbito educativo y ha remarcado que se trata de una actitud "fundamental" para la educación del futuro en la comunidad.


La consejera ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación, después de que fuera increpada e insultada por alrededor de doscientas personas que la esperaban a las puertas del colegio Joaquín Costa, donde se reunió con asociaciones de padres y madres de alumnos para explicarles el alcance que tendrán en Aragón los ajustes en materia educativa propuestos por el gobierno central.


Lo primero que ha querido hacer Serrat ha sido enviar un mensaje de tranquilidad a las familias e insistir en que la educación pública "no está en riesgo" y que "no hay alarma educativa", ya que en Aragón las medidas adoptadas están "en su grado mínimo" y "no afectan directamente a los niños y a la calidad educativa".


Aunque ha manifestado su "comprensión" y "respeto" hacia todos aquellos que "expresan de forma legítima sus reivindicaciones", ha lamentado el "nivel de agresividad y de violencia" mostrado por algunos, una actitud que en su opinión traspasó "los límites del respeto para llegar al ataque personal".

Encuentro con los padres

Respecto a la sesión de trabajo, ha explicado que estaban convocadas las asociaciones de padres y madres de la escuela pública y concertada, un encuentro que transcurrió "con normalidad" y prueba de ello es que hubo "más de veinte intervenciones" y sobre todo de "representantes de la escuela pública".


Y ha hecho hincapié en que "no se limitó el acceso a nadie", y de hecho "algunos de los colectivos que han protestado por ello estuvieron dentro del aula, tuvieron ocasión de intervenir y decidieron abandonar la sala de forma voluntaria".


Lo que sí ha reconocido es que se tomaron medidas de seguridad que pudieron suponer "algún trastorno a personas que estaban convocadas al acto", pero ha remarcado que en el departamento eran conscientes de que había voluntad en algunos sectores para que "el acto no transcurriera con normalidad".


La consejera ha apelado a la responsabilidad y ha insistido en que todas las partes tienen "que hacer un esfuerzo", ya que "por encima de los intereses particulares están los intereses generales", y en este sentido ha considerado que "el diálogo y el acuerdo" es "fundamental para el futuro de la educación en Aragón".


Por ello, se van a convocar de nuevo las mesas técnicas y se va a continuar el debate "para resolver los temas pendientes y llegar a acuerdo", ya que el departamento no tiene voluntad de cerrarse al diálogo, ha dicho la consejera.


"Lo hemos demostrado no solo con palabras, sino con hechos, me he reunido con todos los colectivos, me he reunido con los directores de todos los centros de la comunidad, con las asociaciones de padres y madres... llega un momento en el que yo ya no sé qué más puedo hacer para transmitir el mensaje de tranquilidad con claridad", ha comentado Serrat.


Porque ha reiterado que las modificaciones que se van a llevar a cabo el próximo curso se refieren a "los liberados sindicales, reorganización en el sistema de pagos a interinos cuando dejan de prestar servicio a la administración o acuerdos sobre el funcionamiento interno de los centros", cuestiones que no tienen que ver con la atención directa a los alumnos.


La consejera ha insistido en que lleva bastante más de un mes explicando la situación de la educación en Aragón respecto a las medidas de ajuste y después de todo sigue teniendo "las puertas abiertas al diálogo", pero "llega un momento que no hay más sordo que el que no quiere oír", ha opinado.