La consejera de Educación, Universidad, Cultura y Deporte, Dolores Serrat, ha manifestado hoy su "máximo respeto" por las movilizaciones convocadas hoy en el ámbito de la enseñanza, aunque ha querido dejar claro que "en Aragón no hay riesgo para la educación pública".

En declaraciones a los medios de comunicación en el Instituto Aragonés de Arte y Cultura Contemporáneos (IAACC) Pablo Serrano de Zaragoza, Serrat ha remarcado que en la comunidad aragonesa "las medidas de racionalización del gasto se han aplicado con la máxima prudencia" y en "los ámbitos mínimos".

Por ello, ha lanzado un mensaje de tranquilidad a los padres y a las familias, ya que los ratios se van a mantener en 25 alumnos en Infantil y Primaria y en 30 en Secundaria, "y por tanto no va a haber pérdida de calidad en este sentido".

"La educación pública en Aragón no está en riesgo, no hay ninguna alarma educativa", ha señalado la consejera, al tiempo que ha apuntado que van a continuar con sus proyectos de calidad y con sus y que desde luego el curso que viene "empezará con la máxima normalidad"

No obstante, ha reconocido que "el máximo esfuerzo" se le ha pedido al profesorado, con el incremento de una hora más lectiva, aunque ha explicado que su jornada "sigue siendo la misma, de 37 horas y media semanales", porque lo que se les ha incrementado es una hora lectiva en Secundaria, de 19 a 20, mientras que en Primaria se han mantenido las 25 horas.

Preguntada por la situación de los interinos, Serrat ha recordado que se contratan en función de las necesidades educativas y "evidentemente" al incrementar en una las horas lectivas de los docentes eso va a suponer una menor necesidad de interinos. "Habrá menos que otros años", ha sentenciado.

Por otra parte, y respecto a la deuda que mantienen con la universidad, de 11 millones de euros, Serrat ha recordado que su Departamento ya ha elaborado un plan de pagos y de hecho esa deuda ya ha bajado en poco más de un mes a nueve millones.

"Seguiremos avanzando en los pagos para que no peligre el funcionamiento de la universidad ni las nóminas del profesorado", ha señalado Serrat, quien sobre este último asunto ha opinado que fue "una llamada de atención" por parte del rector aunque "quizá exagerada, porque generó una alarma que tampoco existe" en la universidad.