Identidad
None
Mis hermanas y yo somos unas caprichosas. Unas veces vamos, otras veces venimos, calle arriba, Coso abajo, a nuestra entera voluntad. Es lo que nos divierte, pero también es lo que nos define.
Mis hermanas y yo también somos unas incomprendidas. Hay quienes nos maldicen cuando nos ven llegar, sin entender que estamos precisamente donde tenemos que estar, y quienes nos reclaman cuando el Astro Rey visita nuestras tierras, sin comprender que precisamente nuestra ausencia sirve para recordarles nuestra utilidad.
Somos amadas u odiadas, bienvenidas o inoportunas, somos furiosas o plácidas, gélidas o ardientes, secas y cortantes. Somos deidades errantes, a veces lloramos de pena si nos desorientamos, pero entonces otra hermana aparece, y enseguida nos recobramos.
A nuestro paso nos llevamos tus malos humos, los renovamos, dispersamos la simiente, y nos sobra tiempo para despeinarte.
Somos corrientes, pero no vulgares, somos las hijas de Eolo, aunque nuestro padre prefiere que le llamen Cierzo, también es muy caprichoso, claro.