CUEVA DE ALBA Y BAÑOS DE BENASQUE

Bueno para la salud

Corría el año 1801 cuando se construyó en un indómito paraje del valle de Benasque una instalación para poder aprovechar las aguas sulfurosas y termales que brotaban de sus laderas. Desde entonces diversos ilustres personajes lo han visitado. ¿Por qué no nosotros?.

Divisamos Literola y el pico de Remuñe.
Bueno para la salud
PRAMES

Cercano al puente que salva el río Ésera (1.540 m) en el Plan de Baños se levanta un cartel que nos indica el inicio del sendero botánico de Cuenca Moral por la orilla izquierda orográfica. A lo largo de este tramo recorremos bosques de pino negro con abetos y tejos, un pequeño hayedo y zonas rocosas.


Ejemplares de fresno, boj, pino negro, tejo, acebo, avellano, abedul, olmo, serbal, arce, haya, entre otros, vamos a observar en este plácido recorrido en su trayecto inicial. Cuando llevamos caminados 3 minutos y vemos una pequeña hondonada, podemos ver un enorme tejo rodeado de bojes situado a 25 m de nosotros a la derecha, que está catalogado como árbol notable de la provincia. Mide 2'7 m de perímetro y 6 m de altura.


De nuevo en el sendero contemplamos, en varios momentos, el cauce del río que en algún momento se precipita en bellas cascadas. También divisamos la cascada de Aigües. Pases a la izquierda de la ruta, al otro lado de la carretera del Hospital de Benasque. Una vez cruzados tres arroyos, nos topamos con la pista que une el Hospital y los Baños de Benasque. Es el punto donde concluye este sendero botánico. Estamos en la cota 1.670.


Seguimos por la pista en sentido ascendente unos 50 m, hasta donde hace un giro a la derecha. En ese punto la dejamos para internarnos a la izquierda por itinerario evidente en fuerte subida. Algún mojón facilita la orientación. La marcha se ve sorprendida por algunos ejemplares de la endémica planta «oreja de oso».


Cuando llevamos casi 100 m de desnivel llegamos a las fuentes de Alba/Fuens de Alba (1.770 m), manantial donde las aguas surgen caudalosas después de un desarrollo subterráneo de más de 4 km. Subimos todavía unos 20 m de desnivel por el lecho del barranco seco hasta dar con la boca de la cueva de Alba (1.790 m), antigua salida natural de la corriente subterránea procedente del ibón grande del Alba. La visita a esta fría cueva requiere material específico de espeleología. Retomamos nuestros pasos hasta la surgencia de Alba (1.770 m) y por sendero marcado seguimos en sentido suroeste. Por un frondoso bosque perdemos altura paulatinamente.


En la cota 1.725 m, a la derecha se yergue un curioso pino, después de haber bajado un tramo con gran inclinación. En la cota 1.710 m remontamos unos pocos metros para cruzar el barranco de Turonet. Enseguida a la izquierda hay un sendero por el que se sube al valle del mismo nombre. Nosotros seguimos en bajada y atravesemos una barranquera. En pocos minutos llegamos al balneario de Baños de Benasque (1.680 m), donde podemos disfrutar de un relajante baño termal, o por lo menos saciar la sed en la fuente minero-medicinal de San Victorián.


El último trecho de la vuelta lo efectuamos por pista asfaltada, con posibilidad de atajo, son 1,6 km hasta el final. En este trayecto contemplamos los picos desde la Tuca del Dalliu o de Estós hasta el Mall Pintrat, pasando por el pico Perdiguero. Sin darnos cuenta volvemos al prado de Plan de Baños.