Los Príncipes celebran el triunfo del 'Bribón'

La princesa de Asturias ha acudido al Club Náutico de Palma tras la última prueba de la 30º Copa del Rey de Vela para esperar la llegada al embarcadero del príncipe al frente del 'Hispano' y festejar junto a don Felipe el triunfo del 'Bribón' en su despedida de esta regata.

En torno a las 17.00 llegaba a pie doña Letizia al Náutico y se acercaba directamente al embarcadero para recibir a su esposo, que la ha ayudado a subir a bordo del 'Hispano' -finalmente quinto entre los veleros de la categoría IRC-A-, donde ha saludado a don Felipe con un beso y ha conversado con él y sus compañeros de tripulación mientras esperaban la llegada del 'Bribón'.

No ha tardado en aparecer esta embarcación, con una inmensa bandera española a modo de vela y entre gritos de «campeones» y aplausos del resto de tripulaciones y de todos quienes aguardaban su llegada, entre ellos don Felipe y doña Letizia.

En la cubierta, José Cusí, armador del 'Bribón' y compañero de navegación del rey durante muchos años, saludaba sonriente, mientras uno de sus compañeros festejaba la victoria descorchando una botella de cava y empapando con su contenido al resto de la tripulación, al público y a sus competidores del 'Hispano', que respondían, en el mismo ambiente festivo, con el agua a presión de una manguera.

Por último, un exultante Cusí, de 77 años, ha completado el ritual de las celebraciones náuticas arrojándose al mar, un gesto seguido por el resto de la tripulación de este velero, que tradicionalmente patroneaba el rey y que este año ha tenido en el timón a Gonzalo Araújo.

Una vez en tierra, ha sido recibido con un beso por su esposa, ha cambiado su empapado polo deportivo por una camiseta blanca, ha saludado calurosamente a don Felipe y a doña Letizia -que le había dado la bienvenida a su llegada al Náutico con un «¡Bravo!»- y ha conversado brevemente con ellos, mientras a su alrededor seguía la celebración con el descorche de otra botella de cava.

Después de permanecer unos minutos con el príncipe en la cafetería del Náutico, la princesa ha abandonado el club a pie.