Saga pedo no es único en su género. En Europa oriental existen especies próximas en Grecia, Macedonia, Bulgaria y los Balcanes, como Saga hellenica, S. rhodiensis, S. rammei o S. natoliae, todas ellas también de gran tamaño y biología similar, salvo en el aspecto reproductivo. Entre algunas de estas especies sexuadas y Saga pedo se producen híbridos naturales allá donde se solapan sus áreas de distribución, revelando su proximidad filogenética como vestigios vivos de la fauna subtropical presente en el sur de Europa a finales de la era terciaria. Una fauna relicta que ha sabido adaptarse al clima mediterráneo mediante sofisticados mecanismos biológicos.

Que estos excepcionales insectos continúen poblando el planeta depende en buena parte del uso que los humanos hagamos de nuestros recursos naturales, y de que dejemos de contaminar nuestros acuíferos y campos con pesticidas que arrasan indiscriminadamente la biodiversidad, eliminando no sólo las plagas y las malas yerbas, sino además a los aliados naturales del agricultor, todos ellos eficaces, inocuos y gratuitos.