Los usuarios de los autobuses con destino a El Burgo, Fuentes y Pina de Ebro estrenaron ayer las nuevas frecuencias, que en el municipio de la Ribera Baja del Ebro ha llegado a triplicar el número de viajes y a recortar el tiempo del trayecto por circular por la N-232 en lugar de la carretera de Barcelona. Los despistes protagonizaron una jornada en la que la supresión de la parada del paseo de la Mina y la falta de señalización de algunos autobuses crearon confusiones.

"A mí los horarios siguen sin venirme bien porque salgo de trabajar a las 18.30 y tengo que salir antes si quiero coger el autobús", explicaba Claudia Vagner, vecina de Pina de Ebro, pero que ayer utilizó el autobús para viajar a Fuentes. "La verdad es que hoy es el primer día y todavía no sabemos muy bien cómo va todo", añadía otra usuaria que se dirigía hasta El Burgo. "Aunque creo que nuestros trayectos apenas se han visto afectados. Las mejoras son sobre todo para los de Pina", decía.

"La verdad es que aún no nos hemos enterado mucho de todas las novedades", comentaba Sara Belled, una joven estudiante que se dirigía hacia Fuentes. "Deberían de haber puesto la parada en un lugar más resguardado", comentaba otra que estaba junto a ella. "A nosotros nos viene bien para compatibilizar el horario con nuestras clases en la Universidad", añadían.

La supresión de la parada del paseo de la Mina se indicaba también en la puerta del autobús encargado del servicio. Además, un cartel en la luna delantera en el que solo se indicaba 'Zaragoza-El Burgo' confundió a los usuarios, que no dejaban de preguntar al conductor por el destino del autobús.

Estas mejoras se suman a las puestas en marcha el pasado lunes en el transporte de viajeros del eje de Valencia y a los municipios de Cadrete, María de Huerva y Botorrita. Para concluir la mejora del servicio de transportes del área metropolitana que se inició el pasado año ya solo queda el enlace con Villanueva de Gállego y Zuera, pendiente de que se desbloquee la negociación con la concesionaria.