COMUNIDAD DE CALATAYUD

El ex alcalde de Alhama, condenado a otros nueve años de inhabilitación

Un juzgado, al igual que ya hizo la Audiencia, lo sanciona por prevaricación y desobediencia.

Pedro Lacruz.
El ex alcalde de Alhama, condenado a otros nueve años de inhabilitación
ARCOS

Pedro Lacruz Francia, ex alcalde socialista de Alhama de Aragón y actual concejal del PAR en la corporación de esa localidad, ha vuelto a ser condenado por un delito continuado de prevaricación y otro de desobediencia. En esta ocasión ha sido el Juzgado de lo Penal número 8 de Zaragoza quien le ha impuesto una sanción de ocho años y medio de inhabilitación para ejercer cualquier cargo o empleo público por el primer delito y un año por el segundo, así como una multa de seis meses a 6 euros diarios.

 

Esta condena se añade a la que le impuso en su día, concretamente el 29 de octubre de 2008, la Audiencia Provincial de Zaragoza, cuando lo inhabilitó por un periodo de diez años por prevaricación. Tanto en aquella ocasión como en esta los motivos han sido los mismos: el empecinamiento de Pedro Lacruz en impedir la incorporación del secretario-interventor municipal Pascual García Gracia a sus funciones.

 

Como la sentencia de la Audiencia todavía no es firme, ya que fue recurrida, y la actual del Penal 8 probablemente también será apelada, el ex alcalde sigue ejerciendo como concejal en el Ayuntamiento de Alhama.

 

Los dos fallos judiciales no son más que el colofón al comportamiento del ex alcalde, que los tribunales califican de "arbitrario" e "injusto", que trató de evitar a toda costa que Pascual García, defendido por Mariano Bonías Trebolle, fuese repuesto en sus funciones. Para ello no dudó en incumplir resoluciones de los propios juzgados y abrir expedientes sancionadores para suspender provisionalmente al secretario en plazos de seis en seis meses. Así estuvo desde mayo de 2005 hasta mayo de 2007, fecha en la que dejó de ser alcalde tras unas elecciones en las que un pacto entre la CHA, el PSOE y el PP le apearon del cargo.

 

La sentencia del Juzgado de lo Penal número 8 hace referencia a los hechos acaecidos a partir de agosto de 2006, puesto que de los anteriores ya se ocupó la Audiencia. En concreto, el fallo considera probado que cuando el 18 de agosto de 2006 -una vez cumplidos seis meses de una suspensión provisional acordada por el alcalde (y que luego fue anulada)-, Pascual García se presentó en el Ayuntamiento de Alhama para reincorporarse a su trabajo como secretario. Allí fue informado de que el alcalde no había impartido ninguna instrucción al respecto. Un funcionario municipal llamó a Pedro Lacruz por teléfono y este le dijo que le transmitiera a García que debía pedir audiencia por escrito.

 

Ese mismo día Pascual García presentó un escrito ante el Ayuntamiento en el que manifestaba su intención de volver al servicio. El 21 de agosto regresó y otro funcionario le dijo que era imposible su incorporación porque el alcalde no había dispuesto nada. Para el juez, Pedro Lacruz omitió disponer nada "de forma intencionada, arbitraria e injusta". El secretario tuvo que acudir de nuevo a los tribunales y un juzgado de lo Contencioso-Administrativo ordenó, como medida cautelar, el inmediato reintegro de Pascual García en sus funciones. Pero mientras se esperaba una resolución del juzgado -que luego le dio la razón- el 5 de septiembre de 2006 el ex alcalde le incoó un enésimo expediente sancionador por supuestas irregularidades en las ventas de unas viviendas en la calle de Marquesa de Esquilache en 2001, y le suspendía por seis meses.

 

Como ya había hecho anteriormente, el secretario ejercitó acciones contra la decisión del alcalde en un Procedimiento de Protección de los Derechos Fundamentales y logró que le volvieran a dar la razón. El 19 de diciembre de 2006 el juzgado ordenó al alcalde que dejara a García que se incorporarse y se negó de nuevo, lo que motivó que el juez ordenara imponer al Ayunta miento multas coercitivas para obligarle a cumplir lo acordado. El ex edil reiteró esta estrategia -en marzo de 2007 le incoó otro expediente por otra supuesta irregularidad en la venta de otras viviendas, que también fue desestimado- hasta que las elecciones lo dejaron fuera del cargo por un pacto entre partidos. Ahora ya lleva dos condenas.