CAMPO DE BORJA

Alarma en Talamantes por una plaga de termitas descubierta este verano

El Ayuntamiento pide ayuda a las instituciones para intentar controlar la profusión de estos insectos. Algunos vecinos han tenido que apuntalar el techo de sus viviendas.

Los vecinos de Talamantes están "preocupados" por una plaga de termitas que está afectando ya a varias casas, alguna de las cuales ha resultado seriamente dañada. El alcalde de este pequeño municipio, José Manuel Jiménez, señaló que "la alerta ha saltado este verano", cuando una vecina puso en conocimiento la afección en su vivienda pensando que era un caso aislado. "Entonces descubrimos que había otras casas con este problema", añadió.


De hecho, hay alguna casa del pueblo que tiene apuntalado el techo "porque los maderos están invadidos" e incluso hay quien ha tenido que cambiarlos, indicó el primer edil. La mayoría de las viviendas de Talamantes, que tiene un censo de 60 habitantes (en invierno solo viven 25 personas), son casas muy antiguas que, aunque rehabilitadas, conservan sus techumbres de maderos.


Jiménez califica la situación como "gravísima" porque "las termitas se comen los maderos enteros y además no dejan rastro, como la carcoma". Al parecer, la zona más afectada se encuentra junto a la calle Mayor. No se conoce por el momento, sin embargo, cuántas casas están invadidas por el insecto, ya que muchas se quedan cerradas tras el verano porque sus propietarios, nacidos en Talamantes, viven en su mayoría en Zaragoza.


Victoria Delgado, una de las más afectadas, manifestaba que habían tenido que "poner puntales en la cochera ante el peligro de derrumbe del techo". Las termitas han destrozado, incluso, la puerta de entrada al inmueble, que "era completamente nueva".


En el número 28 reside Ángeles Chueca, cuya puerta ha sido pasto de la voracidad de los insectos. Ha tenido que cambiar tres maderos del patio de entrada a su domicilio. Ambas vecinas aseguran que existen al menos seis casas afectadas "que se sepa", por lo que piden a las instituciones ayuda para paliar este grave problema. "A ver si alguien nos echa una mano porque el tema es muy serio", coinciden.


Uno de los tratamientos para atajar el problema pasa por crear una barrera química alrededor de la propiedad, de forma que los insectos se alejen de ella. Se trata de perforar el suelo y los muros e inyectar insecticida para que las termitas se alejen. También existe un sistema de cebos con un producto biocida que intoxica las termitas.


En cualquier caso, para aplicar una solución es necesario conocer primero el alcance de la plaga, y para ello debe realizarse un estudio de situación de todo el municipio. Pero, como señala el alcalde, "el Ayuntamiento no tiene dinero para afrontar un estudio de todo el pueblo, que cuesta 8.000 euros". Por ello, se lamenta de que "en Aragón no hay ayudas para hacerlo y controlar este problema". En cualquier caso, si no se toman "medidas urgentes", la plaga podría extenderse por toda la localidad.