MANCOMUNIDAD CENTRAL ZARAGOZA

Asediados por las obras y las máquinas en Villanueva de Gállego

Son pocos los que ya disfrutan de las amplias aceras de la avenida de Gómez Acebo y muchos los que siguen quejándose de las obras de ampliación de la antigua travesía de Villanueva de Gállego. Aunque ya hay un tramo abierto al tráfico, todavía quedan muchos flecos por pulir. Y todavía más en las partes que siguen haciendo que los peatones circulen entre zanjas, montones de arena y máquinas.


Los trabajos comenzaron el pasado noviembre y, desde entonces, los comerciantes han sido los más perjudicados: las pérdidas en sus negocios son enormes y algunos incluso van a cerrar. Desde el principio de los trabajos, un letrero en la pastelería que hay a mitad de la calle informa del cierre temporal del comercio por las obras.


Los camiones no podían descargar, algo que siguen sin poder hacer en otros establecimientos. Es el caso del bar Tíbet, donde continúan sin poder llegar los camiones que suministran las bebidas. Alberto Lafuente es el propietario del local, al que las obras han hecho que una escalera en completo desnivel separe la barra de la terraza que colocan en la calle en verano.


Y las dificultades de los peatones para llegar hasta los establecimientos también pasan factura. El propietario de una tienda señala que las pérdidas en las ventas han llegado al 40%. Todavía más negativos son los datos de Elena Manogué, una joven de 21 años que ve con tristeza cómo va a tener que cerrar el negocio de peluquería canina que inauguró con tanta ilusión. "He perdido un 80% de ventas", comenta. "Los clientes no pueden llegar con el coche hasta la puerta y los 20 kilos de pienso para perros no son fáciles de transportar", añade.


Además, se queja de que el Ayuntamiento no se preocupó de hacer la obra por partes para cortar al tráfico pequeños tramos. El próximo 20 de septiembre, Elena bajará por última vez la persiana. "Durante un tiempo ni siquiera podía abrir la valla del escaparate por las montañas de arena que había en la puerta. Muchos clientes se acercaban, pensaban que estaba cerrado y se iban", añade.


El plazo de ejecución de las obras era de 18 meses, pero después el Ayuntamiento decidió ajustarlo a un año bloqueando la entrada sur al municipio. Ahora, este acceso se ha abierto, pero sigue habiendo muchos fallos: garajes que han quedado inutilizados por el desnivel con la calle, alcorques que flanquean los accesos al paseo de la Estación...


Incluso los propietarios llegaron a hacer su propia queja pública construyendo un monumento con las piedras de la propia obra. En lo alto, un cartel rezaba "Monumento al cajón lleno. Los comerciantes de la zona cero no te olvidan". Pero solo duró un día.


Desfase presupuestario


El pleno del 14 de julio aprobó una modificación presupuestaria de la obra por valor de 815.000 euros, lo que supone un incremento del 39,55% sobre el presupuesto de ejecución material (de unos 2 millones de euros). Las justificaciones dadas fueron modificaciones como el desmontaje de señales, diferencias por mediciones... Todo ello cuestiones previsibles, como critica la concejala de la oposición María del Carmen Escuín (PP).