Rogelio Silva enfría las expectativas de crear la comarca de Zaragoza

El presidente de la Mancomunidad Central de Zaragoza (MCZ), Fernando Salvador, fue directo: "Buscamos un reconocimiento comarcal", dijo. "No tiene ningún sentido crear una comarca a la fuerza", le respondió el consejero de Política Territorial, Rogelio Silva. Su discurso, realizado durante la firma del convenio por el que el Gobierno de Aragón destinará 700.000 euros a varios servicios de la Mancomunidad, enfría el objetivo de sus actuales responsables de instituir la comarca 33 antes de que concluya esta legislatura, o bien de dejar casi lista la tarea.

El alcalde de La Puebla, en consenso con los vicepresidentes de la MCZ, los regidores de Utebo, Villanueva de Gállego, Cuarte de Huerva y El Burgo de Ebro, había instado meses atrás al Ejecutivo autonómico a retomar los trámites para dar un impulso al proceso de creación de esta institución. Hasta el momento, la respuesta de los dirigentes regionales ha sido siempre muy fría.

Silva utilizó como argumento la "peculiaridad" que supone el hecho de que el área aglutine una ciudad que supera los 600.000 habitantes frente a municipios que se quedan lejos del millar, como Jaulín o Mediana. "Esto distorsiona la mecánica de trabajo", manifestó el consejero del Ejecutivo autonómico. "Queremos algo que realmente funcione -añadió Silva-. Mantenemos contactos para poner cuestiones en común sin ninguna prisa ni urgencia. No ponemos fecha, se hará en su momento".

Por otro lado, el consejero sí quiso dejar claro el interés del Gobierno de Aragón en esta cuestión, y para ello recordó que la Mancomunidad fue declarada en su día de "interés comarcal".

Asimismo, el responsable de Política Territorial destacó una "circunstancia diferente" para la actual Legislatura: la inclusión en el recién aprobado Estatuto aragonés de la Ley de Capitalidad, diseñada para Zaragoza. "Son dos procesos paralelos", advirtió Silva.

Por su parte, Fernando Salvador mencionó las "grandes expectativas" que tenían los responsables de la Mancomunidad Central en que el proceso siga su curso: "Demandamos más aportaciones económicas, pero para cubrir las necesidades es importante tener las competencias", dijo. "Esa es nuestra meta", sentenció el alcalde alfindeño.

El convenio de colaboración, el cuarto de estas características y cuyo contenido ya fue dado a conocer días atrás, supondrá una inversión de 488.835 euros para renovar equipamientos y mejorar servicios, 165.444 euros para gastos de funcionamiento de la MCZ y 44.708 para material informático. Las actuaciones han sido solicitadas por los propios municipios, dentro de los cinco ejes que forma el entorno metropolitano, en función de sus necesidades.

Entre otros, el convenio supone la renovación de servicios de la avenida de Gómez Acebo, en Villanueva de Gállego, la ampliación del campo de fútbol de La Puebla, el acondicionamiento del espacio público Setabia, la ejecución del pozo del Parque Las Fuentes y la ampliación de la red eléctrica de la zona de Ferias en la localidad de Utebo.

Diferencias en servicios

Al margen de esto, Rogelio Silva se refirió a las diferencias en el nivel de servicios que ofrecen las diferentes comarcas, y que varían hasta el punto de que la Ribera Alta del Ebro tiene casi 13 plazas de residencia por cada 100 mayores mientras que territorios como Bajo Aragón-Caspe o Bajo Cinca poseen una tasa cuatro veces inferior. El consejero de Política Territorial reconoció que hoy por hoy en el panorama aragonés de las comarcas existe "alguna disparidad", pero que el departamento lo intenta "solucionar" a través del Fondo de Cohesión Comarcal.

El dirigente autonómico atribuyó el mayor desarrollo en esta cuestión de unas comarcas frente a otras a "determinadas políticas sociales" impulsadas tiempo atrás por los alcaldes de instalar una residencia en su localidad. "Muchas veces estas políticas van cambiando, hay que ver los servicios sociales en su conjunto", recalcó.