MANCOMUNIDAD CENTRAL DE ZARAGOZA

El pleno de Villamayor decide hoy agregarse a Zaragoza otra vez

La iniciativa cuenta con el apoyo de los socialistas y deberá ser refrendada en pleno por el Consistorio zaragozano. Después, se iniciaría el expediente administrativo en la DGA.

El Ayuntamiento de Villamayor lleva hoy al pleno su anexión al Ayuntamiento de Zaragoza. Dos años después de segregarse de la capital aragonesa, el gobierno del PSOE aprobará un acuerdo plenario con el que comenzará el proceso inverso con el que dejaría de ser un pueblo independiente para volver a convertirse en un barrio zaragozano.

Tras el intento fallido de una segunda consulta popular prevista para el pasado enero, el gobierno decidió solicitar directamente su adhesión a la capital. Para los socialistas, que recuperaron la Alcaldía en las últimas elecciones municipales, el respaldo que obtuvieron en los comicios es más que suficiente para pedir su adhesión de forma directa.


La mayoría absoluta de los socialistas garantiza la aprobación de este punto de orden del día en Villamayor. Aunque el acuerdo deberá ser refrendado después por el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza, para iniciar, a continuación, el expediente administrativo en el Gobierno de Aragón. Si es aprobado el proceso, el Ayuntamiento seguirá el procedimiento con asesoramiento jurídico.


"La idea era que los vecinos pudieran decidir con una consulta de opinión, pero como no pudimos hacerlo.... Queremos que se conozca la volunta democrática. La segregación fue contra natura, pese a ajustarse a derecho", dijo Clemente Martínez, alcalde de Villamayor.


En esta línea, Martínez indicó que la sentencia por la que se llevó a cabo la segregación decía que debían mantenerse o mejorar los servicios existentes. Y criticó que "no se haya tutelado el proceso de segregación por quien debería haberlo hecho".


El Ayuntamiento de Villamayor todavía está pendiente de que el Tribunal de Cuentas diga si es viable de forma independiente. Aunque el equipo de gobierno tiene claro que la situación económica por la que pasa el Consistorio es muy difícil. Hasta que se independizó, Villamayor dependía de Zaragoza para servicios básicos como el transporte, el agua, las basuras o la policía.


Según los datos facilitados por Clemente Martínez, el déficit que genera el autobús mensualmente es de 50.000 euros. Además, en el último pleno el Ayuntamiento tuvo que suspender las 400 tarjetas de pensionistas que había en vigor. "De las cien que había, en el tiempo que estuvo en el poder la junta gestora, aumentaron a 400. Fue algo puramente electoralista, pero inviable para asumir con la situación económica que tenemos", dijo el alcalde.


Además, un informe de las cuentas encargado por el gobierno dio a conocer que la deuda del Consistorio era de más de un millón de euros.


Para José Luis Montero, de CHA, la propuesta de anexión a Zaragoza no tiene fundamento. "Entendemos que no cabe otra vez volver a lo mismo", dijo Montero. "No se puede decir que el municipio no es viable porque con trabajo y con ganas de hacer las cosas, es cien por cien viable", añadió el nacionalista. Además, incidió en que esta propuesta volverá a "crispar y dividir a la población" y en que se necesitan ocho votos para sacar adelante la propuesta.


Este periódico no pudo contactar con el único concejal del PP en Villamayor, Francisco Martín. En las elecciones de 2007, el PSOE obtuvo 1.004 votos, un 51,94% del total. CHA obtuvo 634 papeletas, un 32,84%. El PAR, con 103 votos, no consiguió representante.


Dos intentos de consulta


El Ayuntamiento decidió en diciembre de 2007 convocar una encuesta de opinión, que, al no ser referéndum, no iba a ser vinculante ni necesitaba ser aprobada por el Consejo de Ministros. Pero apenas unos días antes de que la votación se celebrara, el Gobierno de Aragón suspendió la encuesta por defectos de tiempo y forma en el proceso. Se consideró que, pese a su denominación, era una consulta popular y que su convocatoria no se ajustaba a la Ley de Administración Local de Aragón.


Esta era la segunda vez que el Ayuntamiento intentaba hacer una consulta para que fueran los vecinos quienes decidieran si Villamayor tenía que ser barrio o pueblo.


En septiembre de 2005, el Ayuntamiento de la capital aragonesa aprobó celebrar una consulta en Villamayor. La situación dividió a los socios de gobierno (PSOE y CHA) del Consistorio zaragozano. Dos meses después, el Consejo de Ministros autorizó la celebración de la consulta, que se planificó para el 15 de enero del siguiente año. Sin embargo, la comisión promotora recurrió el referéndum, que finalmente fue suspendido por una orden judicial.


El 24 de enero, el Gobierno de Aragón firmó el decreto de segregación, que se hizo efectivo dos días después. Aunque en el pueblo, la división continúa presente dos años después entre quienes apoyan que sea pueblo y quienes preferirían que volviera a ser barrio.