El CD Ebro no descarta realizar movimientos en el mercado de invierno

La plantilla del CD Ebro descansa desde que el árbitro decretó el final en su último y polémico encuentro contra el Barcelona B, en el que se acabó con un protestado 1-2 en contra, y lo seguirá haciendo hasta el próximo 28 de diciembre. Diez días de asueto merecido para un grupo que ha hecho los deberes durante la primera vuelta, en la que acaba octavo del grupo III de Segunda B con 27 puntos, dos más que la temporada pasada a estas alturas. No habrá actividad sobre el césped del CMF La Almozara, pero sí en los despachos. El capítulo de entradas y salidas puede registrar novedades en el mercado de invierno.

La entidad arlequinada no descarta la incorporación de un atacante, que refuerce una parcela, la del gol, en la que llegó a sufrir una sequía de seis encuentros consecutivos sin marcar. Para que esto suceda, se manejan dos posibles escenarios. En el primero debería producirse como espoleta alguna baja entre los componentes del actual equipo con ficha sénior. Actualmente, las 16 que se permiten tener en la categoría de bronce del fútbol español están copadas. Sin embargo, varios jugadores no están contando con los minutos que les gustaría y podrían cambiar de aires. De darse el caso, el mercado para buscar la cara nueva sería más amplio.

Si esto no sucediese, el campo se restringiría al quedar las posibilidades limitadas a futbolistas con licencia sub 23; es decir, jóvenes promesas. Esta condición la tienen ahora mismo en el Ebro los porteros Marqueta y Peral, el defensa Santigosa y el delantero Txema Pan.

El supuesto nuevo delantero debería competir por minutos con Pan, el atacante que hasta ahora ha tenido menos protagonismo y que aún no ha marcado, Canario, autor de tres goles, y Gabarre, pichichi con cinco dianas y el que en más ocasiones ha sido titular, quince.