Lorena García: "Tengo que imponerme a tiarrones de cien kilos"

La aragonesa está viviendo su primer año como árbitra de categoría nacional. Tras haber sido jugadora y entrenadora, dirige partidos de Primera masculina y de División de Honor femenina, un nivel en el que solo ocho de sus 158 colegiados son mujer.

Árbitra y de balonmano, no resulta fácil encontrar muchas mujeres que se decanten por esta opción.

Dirijo partidos de Primera Nacional masculina y de División de Honor Plata femenina. De mi nivel, en toda España estamos 158 árbitros, de ellos solo ocho somos mujeres. En Aragón, ahora ha empezado a animarse alguna chica, pero todavía se encargan de categorías escolares. Por encima de mi solo están José Antonio Yagüe y Andrés Peñaranda.

¿Qué le hizo decidirse por hacerse árbitra?

Había sido jugadora y entrenadora, y me quedaba por probar el arbitraje. Empecé en 2011 y ésta es mi primera temporada a nivel nacional. Ya he actuado en campeonatos de España y en torneos internacionales.

Habiendo tocado todos los palos del balonmano, ¿de dónde le viene esta pasión?

Siempre me ha gustado el deporte, de hecho este curso terminaré Ciencias de la Actividad Física y del Deporte. Nadie en mi familia había practicado el balonmano, pero a mi me gustaba verlo por la televisión y me animé a probar. Me atraía que era físico y que en los partidos el nivel de participación de cada jugador es muy alto. Con 12 años empecé en el Almozara. De ahí pasé al Rotulos, de División de Honor B, y cuando desapareció, al Stadium Casablanca. También tengo el título de entrenadora de primer nivel.

Coger el silbato le habrá supuesto colgar las zapatillas.

Ahora ya no juego, solo voy a entrenar con mis amigas. Cuando las veo en acción sí que me tienta un poco, pero sé que mi futuro está en el arbitraje.

¿Le respetan los jugadores?

Me tratan bien desde siempre y en Aragón me han cuidado mucho. Aunque soy una chica de cincuenta kilos y 1,65 de altura y enfrente tengo tiarrones de cien kilos, tengo mucho carácter.

¿Hay mucha diferencia entre dirigir partidos de categoría regional a hacerlo a nivel nacional?

El nivel de juego es muy diferente y, además, como la liga está dividida en grupos también los estilos cambian mucho en función de dónde te toque arbitrar. En el grupo vasco, por ejemplo, los partidos son más físicos y en el catalán prima la velocidad. Además, las rutinas también cambian. Ahora tengo que llegar a los partidos una hora antes y después hay que ver el vídeo y realizar informes.

Este fin de semana ha estado arbitrando en la Comunidad Valenciana el sector del Campeonato de España juvenil, allí coincidió con colegiados de otras comunidades, ¿es muy diferente la forma de arbitrar en otros lugares?

Suelen variar las formas, pero en septiembre nos dieron unas pautas que tenemos que seguir. Aprendemos mucho los unos de los otros, porque vamos a ver los partidos en los que no pitamos.

¿Se ve en categorías superiores?

Me gustaría, pero primero tengo que aprender y desarrollarme en el nivel en el que estoy.