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Ya estoy independizado, ¿alquilo un piso para compartir o mejor una habitación?

Desde Tecnocasa explican los pros y contras de cada opción, en las que el contrato, la fiscalidad y la responsabilidad constituyen elementos fundamentales.

Uno de los puntos negativos de alquilar una habitación es que no se puedes desgravar fiscalmente, ya que no se considera arrendamiento de una vivienda habitual.
Uno de los puntos negativos de alquilar una habitación es que no se puedes desgravar fiscalmente, ya que no se considera arrendamiento de una vivienda habitual.

¡Por fin te independizas! Enhorabuena por este gran paso. Ahora te toca decidir si vas a alquilar un piso para compartir o solo vas a alquilar una habitación. Para evitar problemas futuros, desde Tecnocasa explican los pros y contras de cada opción.

Si es la primera vez que te vas a vivir por tu cuenta, es muy posible que no puedas o no quieras vivir solo. La convivencia con otros compañeros es toda una experiencia que está bien vivir al menos una vez en la vida. Si te apetece compartir piso, en primer lugar, y aunque no sea un trámite común, es recomendable que firmes un contrato por escrito del alquiler de la habitación. De esta manera te protegerás ante posibles problemas o conflictos.

El contrato tendrá que estar firmado por ambas partes y lo ideal es que incluya aspectos como la habitación exacta que ocuparás en la casa, el precio del alquiler y la forma de pago que habéis escogido. Si pagas en efectivo, recuerda pedir el recibo. En el contrato también debería figurar la duración del alquiler, que será la pactada en el contrato. Para este tipo de alquiler no tienes derecho a prórroga. Es conveniente poner también por escrito los servicios incluidos en el alquiler (internet, uso de cocina, baño…) y cómo se reparte el pago de las facturas y de los gastos extras que puedan surgir.

Si la persona que te alquila la habitación es el titular del contrato de alquiler, estaría bien que te asegures antes de firmar nada de que el propietario de la vivienda ha dado su autorización expresa para alquilar habitaciones. Si no es así y se entera, el propietario puede rescindir el contrato de alquiler.

Los contras

En cualquier caso, alquilar una habitación tiene sus pros y sus contras. En este caso, uno de los puntos negativos es que no te puedes desgravar fiscalmente el alquiler de una habitación, ya que no se considera arrendamiento de una vivienda habitual. Otro contra es que, en el caso de que el propietario decida vender la vivienda, tu contrato puede extinguirse y no tendrás derecho de adquisición preferente de la casa, un derecho que sí tendrías si alquilas el piso completo.

En el caso de que vayas a a alquilar un piso para compartirlo con otras personas, lo primero que debes saber es que en ese tipo de contratos de arrendamiento se debe especificar quién tendrá que responder frente a las obligaciones del contrato. La responsabilidad en estos casos puede ser de dos tipos: mancomunada o solidaria.

En el caso de que el contrato de arrendamiento del piso compartido no se establezca nada sobre la responsabilidad de los inquilinos, la responsabilidad será mancomunada o parcial. Esto significa que cada inquilino responderá únicamente por su parte proporcional de las obligaciones. Así, por ejemplo, si uno de tus compañeros o tú mismo quiere dejar el piso, tendrá que pagar al propietario la renta que le corresponde del tiempo que le quede de contrato y se le devolverá su parte de la fianza.

Además, en este caso, si uno de vosotros deja de pagar el alquiler, el arrendador puede pedir judicialmente la finalización del contrato. Si el resto de inquilinos acuerdan asumir la totalidad del pago y el arrendador lo acepta, serán ellos quienes podrán reclamar al que dejó de pagar.

La responsabilidad solidaria significa que cada inquilino responde de forma íntegra de todas las obligaciones pactadas en el contrato. En este caso, si una persona deja el piso, el contrato seguiría en vigor para el resto. Eso sí, el arrendador puede exigir que se siga pagando la renta íntegra y, en el caso de que no se cumpla, puede reclamar a cualquier inquilino el pago del alquiler pactado.