ZARAGOZA

"La parte trasera del Centro Cívico Tío Jorge siempre está llena de porquería"

La asociación de vecinos ya ha puesto de manifiesto la situación ante la Junta de Distrito ?en numerosas ocasiones?.

Suciedad en la trasera del Centro Cívico Tío Jorge
?La parte trasera del Centro Cívico Tío Jorge siempre está llena de porquería?
T. M.

El Centro Cívico Tío Jorge se creó en 1987, convirtiéndose en el primero en inaugurarse en Zaragoza, algo de lo que los vecinos del barrio zaragozano del Arrabal se sienten muy orgullosos. Bien, pues desde entonces nadie se ha hecho cargo de la limpieza de la parte trasera de dicho centro –que conecta con la calle de Sixto Celorrio- , donde se ubica la rampa de entrada a la ludoteca y por la que a diario pasan numerosos niños, madres con carritos y personas con movilidad reducida.


La contrata de limpieza del edificio no tiene establecido en el pliego de condiciones la adecuación de esa pequeña, pero siempre sucia zona. A Parques y Jardines tampoco les corresponde porque ellos se encargan del espacio que hay entre la valla del centro y la zona verde del parque, al lado de la plaza de San Gregorio. Y, Fomento, por su parte dice que su límite se encuentra en el bordillo porque el resto es acera pública”, explica Rafael Tejedor, presidente de la Asociación de Vecinos Tío Jorge Arrabal.


Y es que la zona en cuestión queda aislada de la calzada, precisamente por un pequeño bordillo que es lo que hace de límite entre la calle y el centro. La situación, además, se complica, porque al tratarse de un espacio fuera del edificio y al aire libre, la empresa de limpieza no se hace cargo. “La cuestión es que esto está siempre lleno de hojas en otoño, bolsas de plástico, porquería acumulada y restos de botellones… Un peligro para los más pequeños”, dice Jesús Martín, de la agrupación vecinal.


“El problema añadido es que, sobre todo las hojas de los árboles incluso llegan a taponar el desagüe del centro. Precisamente también aquí está la arqueta del depósito de gasoil del edificio. Es, incluso una situación alarmante”, apunta Carmelo Fuertes, miembro de la asociación de vecinos del barrio.


“No sabemos a quién ni dónde tenemos que acudir para se ponga fin a esta problemática. Ya lo hemos puesto de manifiesto en la Junta de Distrito y siempre nos dicen que lo mirarán, pero así seguimos”, apunta Rafael Tejedor. “Ha llegado un punto en el que pasar por aquí y ver que todo está sucio forma parte de la normalidad. Y es entendible, ya que solo se ‘limpia’ cuando llueve”, concluye el presidente de la Asociación de Vecinos Tío Jorge Arrabal.