FOLCLORE

Las casas regionales toman el consistorio

Entre gaitas, mantillas y canapés terminaron el alcalde y los concejales la segunda Ofrenda de las fiestas.

Jaime Feijoo, Juan Alberto Belloch y Fernando Gimeno, ayer en el Ayuntamiento.
Las casas regionales toman el consistorio
ESTHER CASAS

¡Asturias, patria querida! empezó a sonar ayer a pleno pulmón gaitero (sin letra, eso sí, aunque algún asistente la tarareaba) mientras el alcalde Juan Alberto Belloch caminaba desde la basílica del Pilar hasta la cercana puerta del Ayuntamiento. Tras él, la corporación municipal, a la que hicieron pasillo los presidentes de las casas regionales, encabezados por su responsable, Jaime Feijoo, ataviados con sus mejores galas. "Ayer vine con el traje tradicional, el de la falda roja. Hoy traigo el de investigación que llaman", explicaba María Fernández, la presidenta de la Casa de Asturias, enseñando un bonito delantal verde brocado que acababa de lucir en la Ofrenda de Frutos. Junto a ella, el responsable de la casa catalana, Jordi Oriol y Clara Perales, una perfecta fallera de gala que se llevó muchos piropos.


"Las valencianas qué orgullosas tenían que estar de verte", le dijo Pilar Alcober, concejal de Acción Social y Juventud, al dar dos besos a la presidenta. Toda la Corporación saludó uno a uno a los invitados. Dentro esperaban los estandartes de las casas y los mismísimos Gigantes y Cabezudos, aunque estos solo estaban 'aparcados' allí y muchos, dando la espalda. En un momento, el Consistorio se llenó de mantillas, peinetas y música. La subida al salón de recepciones fue un desfile de coloridos trajes que camuflaban los oscuros modelos de los políticos, aunque había alguno que lucía por segundo día indumentaria aragonesa como la popular Carmen Galindo. Su compañera de formación Carmen Serrat ya iba de paisano. Dentro hubo quien no esperó a los discursos para comerse a hurtadillas un canapé. "La gente tiene hambre, que llevan ya triplete con la Ofrenda de Flores, la de Frutos y luego el Rosario de Cristal", justificaba Ana Urbano, luciendo una llamativa "gorra de apañar" de la región extremeña de Montehermoso.


Era una de las pocas que no había sucumbido a la tentación de fotografiarse con el alcalde, al que rodeaban un grupo de sevillanas. "Estamos muy agradecidas porque viene a vernos muchas veces a la feria de Andalucía", decía María Pilar Martínez. "Él y toda la Corporación", puntualizaba, para no dar lugar a malentendidos. Un grupo de chulapos prefería tener un álbum más amplio. "Yo me he fotografiado ya con Domingo Buesa y Manuel Medrano", explicaba Mª Antonia Díaz, presidenta de la recién creada casa madrileña, junto a los sonrientes concejales populares.


Debe de ser que el color de la comunidad tira. "Pero con el alcalde, el primero", puntualizaba. Menos éxito tuvieron el vicealcalde Fernando Gimeno o el concejal de IU José Manuel Alonso. Otros como el popular Sebastián Contín hicieron mutis por el foro pronto.