DURATE LAS FIESTAS DEL BARRIO DE DELICIAS

La defensa del acusado por degollar a un joven reconoce el asesinato

La defensa asume que los hechos son constitutivos de un delito de homicidio aunque solicita la aplicación eximiente incompleta por enajenación alcohólica.

La defensa del joven acusado de degollar a otro durante la celebración de una fiesta en el Parque de Delicias de Zaragoza ha admitido hoy que los hechos son constitutivos de un delito de asesinato, pero ha solicitado al tiempo la aplicación de una eximente incompleta por enajenación alcohólica.


En la jornada final del juicio con jurado contra Gustavo Henríquez V.Q., de 22 años, por la muerte de Juan Carlos Hidalgo, la letrada de la defensa ha asumido los cargos por asesinato contra su cliente, aunque ha solicitado una sentencia inferior a la de las acusaciones al entender que actuó condicionado por el alcohol.


La abogada, quien había solicitado inicialmente la libre absolución del procesado, ha modificado sus conclusiones tras escuchar el testimonio de los peritos forenses que realizaron la autopsia a la víctima, y la de los que evaluaron el perfil psiquiátrico del presunto asesino.


Los hechos se produjeron sobre las 23.20 de la noche del 7 de septiembre de 2010, durante la celebración de las fiestas patronales del barrio de Delicias, a causa de supuestas diferencias que enfrentaban al procesado y a su víctima.


Según la fiscalía, el acusado se situó junto a la espalda de su víctima y sin mediar palabra le cortó el cuello con una navaja de ocho centímetros de hoja y le seccionó la yugular, lo que le provocó la muerte unas horas después.


Los médicos que realizaron la autopsia han explicado que la víctima sufrió una muerte violenta a consecuencia del shock hemorrágico que le produjo la herida, que han calificado de "certera, hecha con precisión y con fuerza".


Estos peritos han defendido la hipótesis de una "etiología homicida" dada las características de la herida, hecha de izquierda a derecha, de afuera hacia dentro y en trayectoria descendente.


En opinión de estos expertos, para quienes la muerte se debió tanto a la pérdida masiva de sangre como a la inundación de los pulmones, la herida evidencia "precisión" ya que la hoja de la navaja salió sin desviarse de su trayectoria de entrada.

Los psiquiatras dudan del acusado

Los psiquiatras han cuestionado a su vez las declaraciones del acusado en cuanto a su supuesta falta de recuerdos sobre la agresión y lo han definido como una persona "fría y controlada", sin enfermedades mentales y "lo suficientemente inteligente para distinguir entre el bien y el mal".


Tras destacar que en sus entrevistas en prisión, el procesado se mostró en todo momento "tranquilo y controlado" y sin mostrar temor a su situación, han añadido que no habían datos que constataran que el alcohol consumido previamente hubiera supuesto una merma en su capacidad volitiva.


El jurado se reunirá mañana para iniciar sus deliberaciones sobre los hechos y valorar la posible aplicación de atenuantes o eximentes incompletas al delito de asesinato planteado tanto por las acusaciones como por la defensa.


La representante fiscal solicita para el procesado 17 años de prisión y 100.000 euros de indemnización para los familiares de la víctima, petición que eleva la acusación particular a 20 años y 180.000 euros.


La abogada de la defensa reclama a su vez una condena de 12 años y 6 meses de cárcel para su cliente por un delito de asesinato con la eximente incompleta de alcoholismo, sin hacer mención expresa a indemnizaciones para los familiares del fallecido.