PRESUNTA RELACIÓN CON UNA RED DE NARCOTRAFICANTES

El jefe antidroga encarcelado en Málaga, de incógnito en los juzgados de Zaragoza

La Guardia Civil se encargó de trasladar y escoltar al teniente, sin permitir que la Policía se hiciera cargo en el calabozo.

Valentín F. F., el teniente de la Guardia Civil y jefe del EDOA (Equipo contra la Delincuencia Organizada y Antidroga de Málaga) encarcelado desde el pasado 21 de diciembre por su presunta relación con una red de narcotraficantes, estuvo el pasado martes en Zaragoza para comparecer en un juzgado. Su presencia pasó casi inadvertida por el empeño que pusieron sus compañeros de la comandancia de la capital aragonesa en organizar su traslado a las dependencias de la plaza del Pilar desde la cárcel de Zuera.


El teniente fue conducido a los juzgados en un coche pequeño, sin distintivos oficiales, entró por el parquin y fue directamente a los calabozos. De ahí fue llevado al juzgado en el que estaba citado y, cuando terminó, se lo volvieron a llevar con la más absoluta reserva.


En principio, la actuación de sus compañeros de la Guardia Civil se puede justificar como una medida necesaria para garantizar la propia seguridad del oficial, pero los policías encargados de la custodia de los presos dentro del juzgado se quedaron atónitos al ver a un interno del que desconocían absolutamente todo. Esto les llamó poderosamente la atención puesto que son ellos los que tienen la competencia en su vigilancia.


Desde septiembre de 2009, la Guardia Civil se encarga exclusivamente de sacar a los presos de la cárcel de Zuera y llevarlos a las dependencias judiciales. Al llegar, se los entregan a la Policía Nacional, que desde ese momento y hasta que regresan de nuevo a prisión se hace cargo de ellos.


En el caso concreto de Valentín F. F., consideran que se rompió la cadena de custodia, al margen de que no fueron informados, por lo menos la mayoría de los que estaban de servicio esa mañana.


El teniente, que desarrolló su carrera principalmente en la Policía Judicial de Zaragoza hasta que ascendió y fue destinado a Málaga, fue detenido el 17 de diciembre por agentes de Asuntos Internos del instituto armado, en el marco de una operación en la que fueron arrestadas otras 18 personas más, entre ellas otros tres guardias civiles, una abogada y un ex futbolista.


La operación, llevada a cabo por el Grupo de Respuesta Especial al Crimen Organizado (GRECO) del Cuerpo Nacional de Policía, comenzó hace un año a partir de una investigación abierta para desarticular una organización que introducía hachís desde Marruecos.


En el transcurso de la misma, se descubrió que el teniente podría estar haciendo una utilización irregular de las bases de datos, así como que intervenía en operaciones de tráfico de drogas en presunta connivencia con confidentes, a los que tenía «blindados» y a los que hacía figurar como personas investigadas. En el momento de su arresto, los funcionarios le leyeron sus derechos por más de media docena de delitos, entre ellos favorecer el tráfico de drogas, omisión del deber de perseguir delitos, asociación ilícita, blanqueo de capitales, negociaciones prohibidas para los funcionarios, contra las garantías constitucionales, revelación de secretos.


A primeros del pasado octubre, en otra investigación a traficantes franceses, apareció el nombre de un español, José A. L., ex futbolista del Málaga, quien supuestamente aprovechaba su relación de confidente del teniente Valentín F. F. para hacer operaciones de tráfico de drogas. El ex deportista estaba actualmente planeando la introducción en España de una partida de hachís procedente de Melilla y, según las escuchas telefónicas a las que estaban sometidos los investigados, aseguraba a sus cómplices que la entrada de la mercancía en la Península estaba absolutamente garantizada.


Los agentes esperaron a que el ex futbolista se dispusiera a coger un avión en Melilla con destino a la capital de la Costa del Sol para detenerlo. A partir de ese momento, el juez volvió a citar al teniente y ordenó su ingreso en prisión de forma preventiva.