VIOLENCIA DOMÉSTICA EN ZARAGOZA

Detenido tras estrangular a su mujer y abandonar a sus dos hijos con el cadáver

El mayor de los niños, de 10 años, llamó a su tío para decirle que estaban solos y su madre se hallaba tirada en el suelo.

La joven Angélica Chusete, de 28 años y origen ecuatoriano, murió ayer estrangulada a manos de su marido, de la misma nacionalidad, en una vivienda del número 103 de la avenida de San José de Zaragoza. El crimen se produjo sobre la una y media de la madrugada, tras una discusión entre la pareja que despertó al mayor de sus dos hijos. El niño, de diez años, se levantó y se encontró el cuerpo de su madre inmóvil y tirado en el suelo. Su padre había abandonado el domicilio familiar. Esta trágica muerte se suma a la que pocas horas después se produjo en la localidad guipuzcoana de Hernani, donde otra mujer de origen andaluz falleció acuchillada por su pareja, también ecuatoriano (más información en la página 24).


Según fuentes policiales, fue el propio hijo de la fallecida quien llamó por teléfono a su tío y le puso al corriente de lo que acaba de suceder. Le contó que su madre estaba mal y que su padre se había ido de casa dejándoles solos a él y a su hermana, de solo tres años. Este familiar acudió enseguida a auxiliarles y, al entrar en la casa, vio que la mujer yacía en el suelo aparentemente inconsciente y con los labios hinchados. El hombre decidió salir corriendo a la calle a pedir ayuda, y casualmente se encontró con un coche patrulla al que dio el alto.


Informados los agentes, subieron a la cuarta planta del inmueble y comprobaron que la mujer presentaba evidentes signos de violencia y que, incluso, podía estar muerta. En cualquier caso, reclamaron enseguida asistencia sanitaria por si todavía podía hacerse algo por su vida. Una ambulancia acudió presta al citado lugar, pero los médicos solo pudieron certificar el fallecimiento de la joven.


Tras recopilar información sobre el marido de la fallecida y presunto homicida, se dispuso rápidamente un dispositivo de búsqueda para tratar de localizarlo. Sin embargo, fue el propio fugado quien llamó por teléfono a la familia para explicarles lo que había sucedido, reconociendo desde el primer momento que había sido él quien había estrangulado a su esposa.


Cuando se produjo la llamada, aproximadamente una hora después del crimen, los familiares estaban acompañados por funcionarios del Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior. Estos consiguieron convencer al hombre de que lo que mejor podía hacer era entregarse. Y así lo hizo, regresando por su propio pie a la vivienda familiar, donde fue finalmente detenido.


El presunto homicida tiene 30 años y ha sido identificado como Luis Eduardo Chacha. Tras pasar la noche en los calabozos, hoy declarará ante el juez de guardia por estos hechos.

 

No había denuncia de malos tratos

La ecuatoriana Angélica Chusete se ha convertido en la primera víctima mortal de la violencia machista este año en Aragón. Como es habitual cada vez que se produce un fallecimiento de esta naturaleza, el Ayuntamiento de Zaragoza ha convocado una concentración de repulsa, que tendrá lugar hoy a mediodía en la plaza del Pilar.


Según confirmaron ayer fuentes policiales, la víctima no había presentado ninguna denuncia previa por violencia de género contra su marido, por lo que nada hacía presagiar este desenlace. Al parecer, el matrimonio llevaba más de seis meses viviendo en el piso donde ocurrieron los hechos y nadie les había visto nunca discutir. De hecho, los vecinos aseguran que hacían una vida bastante normal y discreta. Ambos se encontraban en situación regular en España y tenían trabajo.