TERUEL

Miles de turolenses estrenaron la nueva Fuentecerrada y celebraron las mejoras

La reforma, que costó un millón de euros, crea un parque de 13.000 metros cuadrados libre de inundaciones.

Cientos de niños acompañados de sus padres acudieron al nuevo parque de Fuentecerrada
Miles de turolenses estrenaron la nueva Fuentecerrada y celebraron las mejoras
ANTONIO GARCíA

"Ha quedado un parque muy bonito, mucho mejor de como estaba antes". "Tiene muy buena pinta y es mucho más espacioso que antes". Los miles de turolenses que ayer se desplazaron a la zona verde de Fuentecerrada para asistir a la apertura de las nuevas instalaciones manifestaron así su satisfacción por el resultado de la reforma, que ha costado un millón de euros y ha sido ejecutada por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ).

Para celebrar la recuperación de la principal zona de esparcimiento de los turolenses, se celebró ayer una fiesta infantil, en la que se repartieron 2.000 regañaos -una típica merienda turolense- y 1.000 botellas de agua. Además, se organizaron talleres, competiciones deportivas y juegos para niños. La gran mayoría de los presentes manifestó su satisfacción por la calidad y amplitud de las nuevas instalaciones. "Ahora -sentenciaba uno de los visitantes- solo hace falta que lo cuidemos".

El representante de la CHJ, Tomás Nebot, recordó que la prioridad del traslado del parque a una zona más elevada fue la seguridad de los usuarios. La anterior localización había sufrido repetidas inundaciones por las avenidas del barranco de Valdelobos, que las atravesaba. Nebot señaló que los trabajos se han acelerado en la recta final para llegar a tiempo para la fiesta del Sermón de las Tortillas, que se celebrará el próximo martes y cuya principal característica es la celebración de comidas campestres en Fuentecerrada.

El nuevo parque cuenta con varias zonas de juegos infantiles, un área de aparatos gimnásticos para la tercera edad y dos canchas deportivas. Dispone también de zonas de aparcamiento. Incluye un aula de la naturaleza que podría especializarse en el funcionamiento de los cauces torrenciales, además de informar sobre los valores naturales del entorno.

Tomás Nebot explicó que la nueva ubicación está libre de inundaciones con un intervalo mínimo de 500 años, frente a la repetición cada 25 años del anterior emplazamiento. Nebot indicó que, además de habilitar un área recreativa de 13.000 metros cuadrados con 71 mesas de pic-nic, la nueva Fuentecerrada dispone de un pabellón con 20 fogones dotados de todas las garantías de seguridad para la prevención de incendios.

Miguel Ferrer se mostró "orgulloso" del resultado de la reforma, que ha convertido "un problema" en un nuevo equipamiento para la ciudad. Ferrer señaló que se ha eliminado el riesgo de inundación, que en algún caso "obligó a los campistas a salir corriendo por miedo a una avenida".

Adelantó que en los próximos días empezará un proyecto complementario para renovar los aseos, localizados junto al antiguo restaurante, y, en cuanto sea posible, se acometerá la colocación de alumbrado público, que aprovechará la preinstalación ejecutada por la CHJ.

El concejal delegado de Parques y Jardines, José Antonio Sánchez, instó a los turolenses a "respetar" las nuevas instalaciones. Señaló que la prueba de fuego será, no obstante, la utilización masiva que, previsiblemente, se hará del parque durante el Sermón de las Tortillas.

La impresión ciudadana fue muy favorable, aunque también hubo algunas matizaciones. Una vecina criticó que para acceder a la principal zona de juegos infantiles "no haya ninguna rampa para bajar con carritos de niño".