MOVILIZACIÓN POPULAR

Los alumnos del colegio de Utrillas dejan de ir a clase para exigir el cese del equipo directivo

Tras tres años de "acoso y coacciones" a profesores y padres, la Ampa se moviliza para intentar lograr una solución.

Los niños, sus madres y padres y los profesores se concentraron ayer en la puerta del colegio.
Los alumnos del colegio de Utrillas dejan de ir a clase para exigir el cese del equipo directivo
ANTONIO GARCíA

El colegio de educación infantil y primaria Villa de Utrillas no impartió ayer clases. Los padres y madres de los alumnos decidieron no llevar a sus hijos al centro educativo como medida de protesta por "el acoso, intimidación y coacción", que, según señalan, vienen sufriendo por parte del equipo directivo desde hace tres años tanto ellos como los profesores.

La movilización, adoptada por la Asociación de Madres y Padres, Ampa, del colegio público de Utrillas se mantendrá por tiempo indefinido, hasta que el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón aporte una solución al conflicto.

Los padres y madres consideran que, después de tres años de sobrellevar "una situación insoportable", la única salida al problema pasa "por la dimisión o sustitución del equipo directivo", según señaló el secretario del Ampa, José Raya.

El colegio Villa de Utrillas, en el que cursan sus estudios 250 escolares, presentaba ayer una situación atípica. Una buena parte de los niños y sus padres se concentraron ante las puertas del centro. Al otro lado de la verja, abierta a un patio de recreo vacío, un grupo de profesores se sumaron a la protesta. De los 22 docentes que integran la plantilla del centro, 18 han suscrito la denuncia.

Ningún miembro de la comunidad educativa del colegio ocultaba el clima enrarecido que viven las aulas desde hace tres años. José Raya explicaba que son continuadas las situaciones de "coacciones y las retenciones de profesores contra su voluntad en el despacho de la directora". "Ha habido casos -añadió- de falta de respeto y referencias a la vida personal de los docentes, lo que supone un auténtico acoso por parte del equipo directivo, formado por la directora, la jefa de estudios y la secretaria".

Los representantes de las madres y padres de los alumnos, que, según afirman, también han sufrido situaciones similares a las padecidas por el profesorado, sostienen que la situación que se vive en el centro está repercutiendo en la educación de los escolares, cuyas edades oscilan entre los 4 y los 12 años. "Todo el mundo está trabajando con nervios, hay casos de llantos, y eso los críos lo ven en el día a día", explicaba José Raya, para quien ha quedado demostrado "que el actual equipo directivo "no tiene un proyecto educativo adecuado".

La situación estalló el pasado día 11, cuando el Ampa y un grupo de 18 profesores enviaron notificaciones a la Dirección Provincial de Educación, denunciando la situación del centro escolar y pidiendo el cese de los directivos.

Diálogo con las partes

La directora del colegio público de Utrillas no quiso hacer ninguna declaración. Se espera que dé a conocer su postura hoy, en una asamblea que mantendrá por la tarde con los representantes del Ampa.

Desde el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón señalaron, por su parte, que se están promoviendo contactos con todas las partes implicadas en este conflicto, "y tras ello, se analizará la situación y se adoptará la medida que corresponda". El director provincial de Educación mantuvo la pasada semana una reunión por separado con el equipo directivo del colegio de Utrillas y con los profesores, y hoy está previsto que se entreviste con los representantes de las madres y padres de alumnos. La idea es contactar con todas las partes.

Esta reunión con el Ampa se había programado ayer, pero las movilizaciones emprendidas por el Ampa la pospusieron.

Fuentes de Educación insistieron en la necesidad "de un diálogo antes de adoptar una postura concreta", y no quisieron pronunciarse sobre la posibilidad de un cese del equipo directivo del centro escolar.

Los alumnos y profesores emprenderán hoy un nuevo día de huelga, con concentraciones ante las puertas del colegio durante el horario escolar. El Ampa está dispuesta a continuar con esta medida mientras no haya una respuesta por parte de Educación.