PATRIMONIO

La Ruta de los Íberos en el Bajo Aragón abre El Palao a los visitantes

El yacimiento alcañizano, uno de los más importante de la época íbero-romana, ofreció ayer visitas guiadas con arqueólogos y actores que teatralizaron una historia de amor.

Varios turistas observan las réplicas de cerámica.
La Ruta de los Íberos en el Bajo Aragón abre El Palao a los visitantes
J. ZARDOYA

Pocas veces el yacimiento ibérico de El Palao estuvo tan concurrido. El Consorcio de Patrimonio Ibérico de Aragón organizó ayer una jornada de puertas abiertas al yacimiento alcañizano, que resultó todo un éxito. Los organizadores querían de esta forma dar a conocer al público los avances en la investigación y los trabajos de recuperación y consolidación arqueológicas efectuados en este importante enclave en los últimos años.

Así, a lo largo de la jornada, cientos de personas pudieron disfrutar de visitas gratuitas guiadas y comentadas por arqueólogos en cinco puntos del yacimiento. En cada uno de ellos, uno o varios integrantes del grupo de recreación histórica Ositanos ambientaban con sus ropajes y vestimentas los puntos mostrados.

Estas visitas guiadas se realizaron durante toda la mañana y la tarde en un flujo continuo de curiosos y aficionados que se acercaron al yacimiento con sus propios vehículos o, también, gracias a un autobús gratuito dispuesto por el Ayuntamiento de Alcañiz desde la capital bajoaragonesa.

"Queremos que la gente conozca el trabajo de los arqueólogos y las últimas investigaciones que se han llevado a cabo en El Palao, uno de los yacimientos más importantes de Aragón de época ibero-romana", explicó el gerente del Consorcio de Patrimonio Ibérico de Aragón y arqueólogo, José Antonio Benavente.

El especialista se mostró "muy satisfecho" tanto del éxito de la jornada, que ya se había sido realizada anteriormente a la finalización de otras campañas arqueológicas, como de los trabajos de recuperación del yacimiento alcañizano. "La Ruta de los Íberos no es solo un producto turístico y cultural, sino que también tiene una vertiente patrimonial muy importante al poner en valor yacimientos que hasta hace pocos años estaban abandonados", aseguró Benavente.

Junto a las visitas guiadas por las distintas partes del enclave, del que se calcula que al ritmo de excavación actual hay trabajo para más de un siglo, se instalaron también un puesto de información, un mercadillo de temática íbera y una taberna al estilo y semejanza de antaño, donde los visitantes pudieron saciar la sed y sofocar el calor de una jornada de agosto.

A última hora de la tarde se realizó una representación teatralizada al pie del yacimiento. Varios personajes vestidos a la manera íbera recrearon una romántica historia de amor a lo Romeo y Julieta en el Bajo Aragón. Se tituló 'El pastor que quiso ser príncipe', una creación de David Castillo, artista plástico de Azaila y presidente del grupo Ositanos, que se representaba por primera vez. "Queremos que el público disfrute de la historia y se apasione, por lo que hemos incluido algún elemento humorístico, pero siempre siendo lo más fieles al contexto histórico en que se desarrolla la historia", explicó Castillo.