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La DGA arreglará la carretera de Cantavieja a Mirambel, con baches a los 6 meses de abrirse

Ejecutará el aval de 150.000 euros que dejó en garantía la constructora, desaparecida por problemas económicos.

La carretera, en la foto, ha tenido que ser parcheada ya en dos ocasiones.
La DGA arreglará la carretera de Cantavieja a Mirambel, con baches a los 6 meses de abrirse
JORGE ESCUDERO

El Departamento de Obras Públicas del Gobierno de Aragón iniciará antes del próximo 1 de noviembre la reparación de un tramo de la carretera A-226 entre Cantavieja y Mirambel en el que solo seis meses después de haber sido puesto en servicio aparecieron en el firme baches, grietas y otros desperfectos. El tramo en cuestión fue inaugurado en febrero de 2010 por el entonces consejero del ramo, Alfonso Vicente, tras un año de obras de remodelación que costaron cuatro millones de euros a la DGA.


En principio, el arreglo no supondrá coste alguno para la Administración autonómica, que tiene previsto llevarlo a cabo ejecutando el aval de 150.000 euros que en concepto de garantía desembolsó la empresa adjudicataria de la reforma, la UTE formada por Ande Ejea S. L. y Construcciones Ayud S. L. Al detectarse los fallos, el Departamento de Obras Públicas intentó contactar con la constructora, pero esta, afectada por problemas económicos ya cuando realizaba la remodelación, se encuentra desaparecida en la actualidad.


El deterioro apareció en un recorrido de dos kilómetros y medio aproximadamente en el que la capa de asfalto final es mucho más delgada que en el resto del tramo remodelado. Según denuncian los alcaldes de Cantavieja y Mirambel, Ricardo Altabás y Ricardo Monforte, mientras que al principio de la carretera el grosor del firme es de ocho o nueve centímetros, en el resto no mide más de cuatro centímetros.


La DGA actuará saneando los blandones y extendiendo en esa zona una capa de refuerzo de aglomerado sobre la que se pintarán las señales correspondientes. Previamente, y después de que hace dos semanas los técnicos de la DGA valoraran sobre el terreno el estado de la carretera, se elaborará un informe con los principales problemas detectados y las soluciones más adecuadas. Según informó Ricardo Altabás, en el presupuesto autonómico del próximo año podrían incluirse partidas económicas que permitan instalar redes en los taludes más verticales a fin de evitar que pequeños desprendimientos de tierra y piedras afecten a la calzada.


Las obras comenzarán a la mayor brevedad posible para evitar que los primeros hielos estropeen todavía más el firme de la carretera, que empezó a levantarse a mediados de 2010, con el paso, prácticamente, de los primeros vehículos. Por ello, según informaron ayer desde la DGA, la mejora se llevará a cabo con la colaboración de los medios propios del Departamento de Obras Públicas.


Por otro lado, desde la Dirección General de Carreteras se quiere garantizar la seguridad vial de los conductores. Para evitar accidentes, el tramo defectuoso ha sido señalizado advirtiendo de la llegada de puntos con gravilla suelta y de la obligación de reducir la velocidad a 40 o 60 kilómetros por hora, cuando en condiciones normales podría circularse por esa vía a 90 kilómetros por hora.


Piden responsabilidades


Los alcaldes de Cantavieja y Mirambel han decidido pedir a la DGA que depure responsabilidades por el rápido deterioro de este tramo de la carretera A-226 que une a ambas localidades del Maestrazgo turolense. Altabás y Monforte quieren que se averigue por qué la obra fue recepcionada por la Administración autonómica sin haber sido ejecutada correctamente.


"Estamos muy interesados en que nuestra reclamación no caiga en saco roto. Creemos que los problemas que han aparecido podrían haberse evitado con un buen control de las obras", afirmó ayer el alcalde de Cantavieja, Ricardo Altabás. No obstante, el primer edil de la capital del Maestrazgo mostró su "satisfacción" por la preocupación que ha demostrado el Gobierno aragonés con respecto al mal estado de la A-226.


Desde el Departamento de Obras Públicas señalaron que la búsqueda de responsabilidades dentro de la DGA por la mala ejecución de la carretera "es una cuestión relativa al personal que debe permanecer en el ámbito interno". Las mismas fuentes oficiales destacaron que "lo importante es que se ha buscado una solución al mal estado de la carretera consistente en ejecutar el aval que dejó la empresa adjudicataria".