TERUEL

La candidatura a Patrimonio Mundial que incluye las icnitas de Galve vuelve a la carga

Tras la reciente negativa de la Unesco a la inclusión, los paleontólogos de Dinópolis trabajan en un nuevo intento.

El contorno de las huellas fósiles de dinosaurio de Las Cerradicas, marcado con líneas blancas y negras.
La candidatura a Patrimonio Mundial que incluye las icnitas de Galve vuelve a la carga
J. E.

 La candidatura de las icnitas de dinosaurio de la Península Ibérica, que comprende entre otras las del yacimiento de Las Cerradicas de Galve, para ser declaradas Patrimonio Mundial no está perdida, según aseguraba esta semana el gerente de la Fundación Conjunto Paleontológico de Dinópolis, Luis Alcalá. Aunque el Comité de Patrimonio Mundial de la Unesco decidiera el pasado lunes, en su reunión mantenida en Brasilia (Brasil), no inscribir las huellas de dinosaurio en el listado de bienes declarados, para Alcalá el proyecto "está vivo", ya que, a su juicio, no ha sido rechazado por la Unesco. El citado organismo ha decidido dar una nueva oportunidad a este proyecto, que comprende 11 yacimientos paleontológicos, de los cuales 8 son españoles y 3 portugueses.

La Fundación Dinópolis, junto con los representantes de las otras cinco comunidades autónomas que participan en la candidatura, además de Aragón, -Castilla y León, Asturias, Cataluña, La Rioja y Valencia-, así como Portugal, deberán aportar la nueva información científica que reclama la Unesco. Solicita que los aspirantes a la declaración demuestren el valor universal excepcional de las huellas de dinosaurio, y recomienda estudiar la relación entre ellas y los yacimientos que ya están incluidos en el listado de bienes Patrimonio Mundial, y que se sitúan en Argentina, Canadá y Reino Unido. Luis Alcalá defiende que el interés de estos asentamientos se centra en la presencia de huesos fósiles. "Las icnitas -concluye- son una novedad, y precisamente en eso se basa nuestra candidatura".

Fuentes del Ministerio de Cultura explicaron, por su parte, que esta nominación trasnacional "es el único caso en que una decisión de no inscripción del órgano asesor de la Unesco ha sido modificada y permite su revisión".

Para perfeccionar la propuesta, España y Portugal preparan la organización de un encuentro internacional de expertos, en el que también participarán los órganos asesores de la Unesco, que tendrá lugar probablemente en el primer semestre del año que viene. En octubre se celebrará una reunión con representantes del Ministerio de Cultura de ambos países para decidir la fecha exacta.

Con los resultados de ese encuentro, se pretende convencer al órgano consultivo de la institución internacional sobre el interés de la candidatura, que opta a estar incluida en la lista de Patrimonio Mundial Natural. Luis Alcalá reconoció que el citado órgano no es partidario de que las icnitas figuren por sí solas en el catálogo de la Unesco y agregó que, por esta razón, "ha sido un éxito de los representantes de la candidatura de España y Portugal que se haya cambiado de criterios y dé una nueva oportunidad".

La candidatura ha tenido numerosas vicisitudes a los largo de los años, tras partir de La Rioja, a principios de los años noventa, precisamente por la reticencia del comité asesor del organismo internacional a incluirla en su catálogo. La propuesta, para la que en principio se habían inventariado 216 yacimientos, ha tenido que ir puliéndose con el tiempo. Pero fue a partir de 2006, en que la Fundación Dinópolis se hizo cargo del informe científico, cuando el proyecto experimentó un fuerte impulso.

El yacimiento de Las Cerradicas de Galve, recientemente protegido con una estructura que lo salvaguarda de las inclemencias del tiempo, es el de mayor concentración de icnitas de todo Aragón, y su interés radica, sobre todo, en la gran variedad de rastros que registra. En la actualidad se han contabilizado 180.

Descubierto en 1986, en el afloramiento turolense se pueden ver huellas de dinosaurios adultos y también de crías. El tamaño de las pisadas de los dinosaurios oscila entre los 15 y los 30 centímetros de longitud. Está datado hacia el final de Cretácico -hace unos 145 millones de años- y en 2003 fue declarado por el Gobierno de Aragón, junto con otros seis del mismo municipio, como Bien de Interés Cultural.

Las Cerradicas ha sido objeto de un estudio minucioso, entre otros, del paleontólogo Félix Pérez, profesor de Geología de la Universidad de La Rioja. Un trabajo suyo resaltó la excepcional concentración de pisadas del yacimiento, en el que se mezclan las huellas de dinosaurios carnívoros con los vegetarianos. Las 180 icnitas fueron realizadas por 18 dinosaurios, 7 de ellos carnívoros y 11 herbívoros.

Entre las notas excepcionales del enclave, figura la detección de comportamientos gregarios en los dinosaurios carnívoros que recorrieron el lugar, donde dejaron evidencias de un desplazamiento en grupo. El paraje, probablemente costero, estaba recorrido por una ligera corriente de agua, que dejó su impronta en forma de pequeñas ondulaciones en el terreno.