TERUEL

Investigan las quejas de dos alcaldes del Jiloca por actuaciones de la Guardia Civil

El primer edil de Caminreal, denunciado por desacato al encararse con agentes de Tráfico.

Imagen de la travesía de Monreal, donde se produjeron denuncias que han provocado quejas.
Investigan las quejas de dos alcaldes del Jiloca por actuaciones de la Guardia Civil
A. GARCíA

El sector de Tráfico de la Guardia Civil en Aragón investiga los incidentes registrados los pasados días 17 de enero y 4 de febrero en Monreal del Campo y Caminreal, respectivamente, cuando se produjo una oleada de denuncias en los cascos urbanos de ambas localidades y se vivieron momentos de tensión al considerar los vecinos que la actuación policial era desproporcionada y abusiva.

El alcalde de Caminreal, Clemente Salas, se llegó a recriminar el comportamiento de los agentes y fue también denunciado por desacato a la autoridad. En total, se produjeron quince denuncias entre las dos poblaciones de la comarca del Jiloca, lo que ha generado malestar entre los vecinos y también de los respectivos ayuntamientos.

Clemente Salas y su homólogo de Monreal del Campo, Jesús Allueva, manifestaron sus quejas en un escrito conjunto dirigido a la Subdelegación del Gobierno solicitando una reunión para exponer sus inquietudes. El encuentro se celebró el pasado día 7 y en él participaron, además de Salas y Allueva acompañados cada uno de un concejal, la subdelegada del Gobierno, María Victoria Álvarez; el secretario general, José Ramón Morro; y el teniente coronel de Teruel, Juan Miguel Arribas.

Tras el encuentro, la Guardia Civil de Tráfico abrió una investigación interna para determinar si hay que depurar alguna responsabilidad entre los responsables de las controvertidas actuaciones o si estas se realizaron con total normalidad y el comportamiento de los agentes fue el adecuado.

Antes de resolverse en un sentido y otro, los mandos de la Guardia Civil de Tráfico de Aragón tomarán declaración a sus propios agentes y también a los alcaldes que han presentado las quejas. En última instancia, la resolución corresponderá al jefe del sector de Tráfico en la Comunidad Autónoma, el teniente coronel José Antonio Fernández.

Desde la Delegación del Gobierno, se limitaron a señalar que «primero se escuchará a todas las partes y luego se decidirá». Tampoco los alcaldes quisieron manifestarse al respecto a la espera de lo que resuelva la Delegación del Gobierno.

La actuación de la Guardia Civil de Tráfico que provocó la polémica en Caminreal se produjo el 4 de febrero, cuando la población celebraba la fiesta de San Blas. Un testigo de la intervención policial consideró «abusiva» la forma de actuar de los agentes, que desembocó en la presentación de dos denuncias por conducir con un exceso de alcohol en sangre y cinco por desacato, una de ellas contra el alcalde por encararse con los guardias e instarles a que salieran del pueblo.

Una presión policial «insólita»

Un vecino explicó que el operativo se desplegó en torno a las 10.00 y en él intervinieron una docena de guardias civiles, que actuaron en la antigua travesía de la población y en las calles adyacentes. Al parecer, el objetivo prioritario del operativo fue detectar la conducción bajo los efectos del alcohol. La misma fuente señaló que se registró una presión policial «insólita» en el interior del pueblo.

En Monreal la intervención policial que ha provocado las protestas del Ayuntamiento se efectuó el 17 de enero, coincidiendo con la fiesta de San Antón. En este caso, las denuncias -más de media docena- se produjeron en la travesía de la N-211 y calles cercanas. Un vecino afirmó que también en este caso la actuación de la Guardia Civil de Tráfico «se salió de madre».

Los agentes que participaron en los controles de Caminreal y Monreal tienen su base de operaciones en el cuartel de esta última localidad, uno de los últimos inaugurados en la provincia.