Esperas de hora y media para lograr cita médica en el Obispo Polanco

El área de Citaciones del hospital Obispo Polanco de Teruel es estos días un remolino de pacientes indignados. Hasta una hora y media -en algunos casos aún más tiempo- aseguran que tienen que esperar para conseguir un volante con el día y la hora en los que pueden acudir a su especialista.

«No hay derecho a esto. He tenido que pedir permiso en el trabajo para venir y no aguanto más. Lo curioso es que la consulta del médico no dura más de cinco minutos y aquí tenemos que pasar prácticamente toda la mañana», protestó el pasado miércoles una mujer que prefirió no dar su nombre.

Otra paciente explicó que, sobre las 11.00 de ese mismo día, sacó el tique número 240 cuando en el marcador luminoso se indicaba que todavía se estaba atendiendo al usuario número 95. «He aprovechado para ir a hacer la compra, he vuelto y aún he tenido que esperar una hora. Tenía delante más de 100 personas», se quejó.

La situación ayer era similar. «Cada vez que vengo, tengo que esperar por lo menos una hora; no sé por qué no es todo más ágil», se preguntaba un hombre. «Me ha dado tiempo de ir a desayunar y volver», continuó.

Más de 1.000 personas al día

A diario, entre las 09.00 y las 14.30, pasan por este Servicio de 1.200 a 1.300 personas. De ellas, un 30% demanda una cita para Radiología y el resto, para alguna de las distintas especialidades médicas con que cuenta el Obispo Polanco. En la ventanilla de Rayos suele haber dos empleados para atender al público y en la de Consultas, tres y, a ratos, solo dos.

Desde el Salud pidieron ayer disculpas por los retrasos, a los que se refirieron como «una situación puntual» motivada por la apertura de las agendas médicas antes del verano. «Todo volverá a la normalidad en unos cuantos días», agregaron.

Las mismas fuentes explicaron que las agendas contienen el calendario de turnos de trabajo y festivos de cada facultativo para los meses siguientes, lo que permite concertar citas con los pacientes. Hay épocas del año en las que algunas agendas permanecen cerradas y no admiten más pacientes, lo que se traduce en una menor presión asistencial en el área de Citaciones.

El responsable de Sanidad de UGT en Teruel, José Batea, destacó que los trabajadores de Citaciones «soportan una gran carga de trabajo» derivada de unas consultas médicas «abarrotadas». Añadió que las plantillas están muy ajustadas y que lo ideal sería aumentar el número de empleados sin llegar, no obstante, a una cifra desorbitada.