INAUGURACIÓN

Albarracín potencia el Museo Diocesano con más salas y una nueva iluminación

La reforma, que fue inaugurada la pasada semana, abre al público las dependencias privadas de los obispos, incluidas la biblioteca y las letrinas.

Albarracín potencia el Museo Diocesano con más salas y una nueva iluminación
Albarracín potencia el Museo Diocesano con más salas y una nueva iluminación
ANTONIO GARCíA

 El Museo Diocesano de Albarracín, un compendio de la historia de nueve siglos de esta diócesis, fue inaugurado la semana pasada tras su completa transformación, con la reubicación de sus 160 piezas, la modernización de sus equipamientos y, sobre todo, con un nuevo sistema de iluminación


. La reforma, que ha respetado la distribución de espacios del antiguo Palacio Episcopal del siglo XVIII, incluye la recuperación de pinturas murales y la apertura al público de nuevos espacios, como la sala de exposiciones temporales habilitada en la antigua despensa de la vivienda de los obispos.

La reforma y modernización del Museo Diocesano, acometida por la Fundación Santa María con una inversión de 250.000 euros, ha durado dos años. Tras la inauguración oficial, una jornada de puertas abiertas sirvió para que los turistas y muchos vecinos conocieran el resultado de la última remodelación. Entre las visitantes, figuró Carmen Laguía, una vecina que conoció el Palacio Episcopal en su época de abandono y decadencia, y que ayer se mostró "orgullosa" del edificio.

A juicio de Laguía, el Museo Diocesano "ha quedado extraordinario. No podía estar mejor". Entre los aspectos que más le llamaron la atención, figuró la nueva iluminación y la distinta distribución de las colecciones. Otra vecina señaló que las piezas artísticas "estaban antes más amontonadas. Ahora están de maravilla".

El vicepresidente aragonés y presidente de la Fundación Santa María, José Ángel Biel, que asistió a la inauguración, destacó la calidad de los trabajos de restauración del patrimonio desarrollados por la Fundación Santa María durante dos décadas, su coste modesto y su rentabilidad social y económica al aprovecharse como recurso turístico y cultural.

La nueva ordenación de las piezas refuerza su presentación didáctica por temas y funciones. Existen salas destinadas, por ejemplo, a las vestimentas litúrgicas de los obispos, instrumentos musicales, esculturas, pinturas y orfebrería. Entre las piezas que despertaron más curiosidad, destaca el pez de cristal de rocadel siglo XVI y la serie de grandes tapices flamencos. El visitante puede, además, hacerse una idea de la austera forma de vida de los obispos de la diócesis -actualmente fusionada con la de Teruel- al visitar las dependencias privadas del prelado, como su despacho, la alcoba, la cocina, la capilla privada y hasta las letrinas.

El gerente de la Fundación Santa María, Antonio Jiménez, señaló, como elemento más destacado de la reforma, la iluminación, que "crea ambientes" y evita la degradación de las obras expuestas. Jiménez indicó que, con la modernización y ampliación del Museo Diocesano, culmina el plan de restauración del patrimonio monumental de la ciudad, con las únicas salvedades de la catedral y de la muralla que rodea el casco antiguo, dos elementos en los que ya se está actuando.