Calles repletas para escuchar los primeros redobles de las procesiones zaragozanas

El pregonero Luis Marcos Sus, párroco de Santa Gema, recuerda en su discurso la figura de Juan Murillo, expresidente de la Junta Coordinadora de Cofradías.

Las cornetas de las distintas cofradías y hermandades, a su salida de la iglesia de Santa Isabel de Portugal.
Las cornetas de las distintas cofradías y hermandades, a su salida de la iglesia de Santa Isabel de Portugal.
Aránzazu Navarro

La Semana Santa zaragozana ya está en marcha. En una tarde para enmarcar, con temperaturas por encima de los 20 grados y las calles repletas de turistas y espectadores, la procesión del pregón dio ayer el pistoletazo de salida a ocho intensos días de imágenes y redobles. Los primeros comenzaron a sonar en la plaza del Justicia poco después de las seis de la tarde, donde el olor a incienso y las cornetas más madrugadoras arrancaron las primeras sonrisas de los cofrades y los aplausos de quienes esperaban con ansia a que la iglesia de Santa Isabel abriera sus puertas.

La colorida y vistosa procesión del pregón –en la que participan todas las cofradías entremezclándose sus hábitos, capirotes y estandartes– recorrió buena parte del Casco antes de desembocar en la plaza del Pilar para el acto más institucional. El presidente de la Junta de Cofradías, Mariano Julve, expresó su deseo de que la Virgen del Pilar interceda para que los cofrades zaragozanos sean "ejemplo de oración y vida cristiana" y disfruten de una espléndida Semana Santa. Por su parte, Luis Antonio Gracia, deán del Cabildo, señaló que Zaragoza siempre "vive abrazada al Pilar" y aseguró que la Virgen es "garantía de fe". En consecuencia, pidió a los presentes que sean "cumplidores en la fe" y "no solo en Semana Santa sino en el día a día durante todo el resto del año".

Fue entonces, poco después de que sonara el ‘Bendita y alabada’ en la plaza, cuando tomó la palabra Luis Marcos Sus, párroco de Santa Gema, que ejerció de pregonero este 2017. Recordó que hace veinte años ocupaba ese mismo lugar la periodista Paloma Gómez Borrero, recientemente fallecida, y también tuvo palabras de reconocimiento para Juan Murillo, expresidente de la Junta de Cofradías, "con quien esta celebración, por la historia, tradición y el buen hacer de los cofrades, obtuvo la catalogación de Fiesta de Interés Turístico Internacional", afirmó.

Ofrenda floral

Marcos, actual consiliario de la Exaltación, recordó que en la Pasión se celebra que Jesús resucitó y dijo que "vive en la fe callada y enamorada de los hombres", así como en "la multitud de los peregrinos que acude cada día al Pilar". También "en tantos hombres y mujeres que hacen el bien y se esfuerzan por construir un mundo mejor y más solidario, sin muros ni diferencias porque todos tenemos la misma dignidad y los mismos derechos".

Mientras fuera de la basílica continuaban los discursos, en el interior los cofrades hacían una ofrenda floral a la Virgen. Después, una vez concluido el pregón, continuó la procesión y los muchos espectadores que se agolpaban en la bandeja de la plaza disfrutaron de las matracas del Ecce Homo, las carracas de La Entrada o las heráldicas del Silencio.Los más avezados, además, se percataron de que este año hay una cofradía nueva, la de San Lamberto, con capa verde y capirote. Entre el respetable había turistas en pantalón corto, otros –incluso– comiendo helados y la gran mayoría tratando de hacer fotos con sus móviles a los bombos, los guiones y estandartes o a los caballos de la Policía Local que abrían la comitiva. El tiempo acompañó –a diferencia del año pasado– y de nuevo la recogida de los cofrades en San Cayetano fue multitudinaria.

Jornada completa

La Semana Santa zaragozana comienza así ocho días de tambores, incienso e imágenes en las calles. Hoy ya se podrán ver hasta ocho procesiones recorriendo muy distintos puntos de la ciudad: desde el barrio de San Gregorio –con el viacrucis de la Coronación– hasta el corazón del Gancho, donde el Silencio y las Esclavas volverán a protagonizar un acto conjunto. También salen hoy en procesión el Nazareno, la Humillación, el Prendimiento, la Columna –que está celebrando los 50 años de su sección de tambores– y la Humildad, cuyos costaleros a la salida de Santa Mónica siempre congregan muchísimo público. También, por descontado, la mañana será para la Entrada de Jesús en Jerusalén, que con sus palmas y carracas tocadas por niños constituyen una de las procesiones más simpáticas de la Pasión zaragozana.

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