El presidente de la Sociedad Española de Medicina del Deporte (Semed), Pedro Manonelles, defiende la necesidad de que los deportistas aficionados pasen reconocimientos médicos para afrontar pruebas como la Quebrantahuesos, la primera prueba de España que los exige.

"En la sociedad existe la necesidad de hacer deporte, pero hay que tener cuidado. Se deben hacer más exploraciones y pruebas de esfuerzo para prevenir incidentes", ha advertido el médico zaragozano en una entrevista.

La Semed ha puesto en marcha desde comienzo de año la Campaña de Aptitud Física, Deporte y Salud -a la que se ha sumado la Quebrantahuesos-, cuyo instrumento de trabajo es la web saldep.es, que tiene como objetivo la promoción de la actividad física y deportiva con el lema 'Salud-Deporte-Disfrútalos'.

Se trata de concienciar sobre la práctica del deporte de forma saludable, divulgar información relacionada con el deporte y la salud, así como crear una mayor concienciación en el mundo del deporte amateur de la importancia de los reconocimientos médicos.

En los últimos doce meses, una decena de aficionados fallecieron cuando practicaban deporte o realizaban pruebas de atletismo, entre ellos un joven de 17 años de Navalcarnero (Madrid) que murió en julio al finalizar una carrera de diez kilómetros en Moncofa (Castellón) tras sufrir dos paradas cardiorrespiratorias.

Desde la Semed pretenden que se exija superar un reconocimiento médico para participar en pruebas de un elevado nivel de exigencia física como ya lo hace la Quebratanhuesos y su hermana pequeña, Treparriscos, que han sido las primeras en España en hacerlo para poder tomar la salida.

Manonelles explica que les está costando convencer a los organizadores de la necesidad de exigir los certificados y que ya preveían que "sería una labor a largo plazo, pero merece la pena seguir trabajando".

"Todavía no se entiende bien por parte de los organizadores y se es reacio a exigirlo, aunque el deportista se ve más seguro y lo agradece porque contempla que cuenta con una cierta garantía de seguridad", ha dicho.

No obstante, están satisfechos porque desde que la marcha cicloturista altoaragonesa lo exige han detectado que "los participantes han tomado conciencia" y se ha incrementado el número de personas que se someten a ellos, no solo en su consulta, ya que es algo que también le han comentado otros colegas del resto de España.

Aunque nunca es agradable decirle a una persona que tiene un problema físico, para Manonelles es de destacar que a algunos deportistas se les han detectado problemas como cardiopatías que "podrían haber desencadenado la muerte", aunque no existe "la prevención absoluta".

"Desde un punto de vista realista, estos reconocimientos significan reducir el número de incidentes graves que se pueden producir. Lo importante es evitar el riesgo. Se basa en el conocimiento y el criterio médico", manifiesta.

En el caso de los deportistas de élite, recuerda que cuentan "con una mayor protección médica", mientras que en aficionados "la carencia es enorme".

Según la última encuesta de hábitos del Consejo Superior de Deportes, aproximadamente un tercio de la población española, entre 15 y 16 millones de personas, practica algún deporte al menos dos o tres horas a la semana.

Según el sexto estudio 'Cinfasalud: Hábitos de los corredores españoles de 2017', el 30,4 % de los españoles practicaba este deporte en 2015 frente al 12,9 % de 2010.

Ir al suplemento de salud.