Perspectiva
Hoy vuelvo a caminar por estas preciosas calles. Esas calles de las que cuando era más pequeña renegaba queriéndome ir a una ciudad mayor. No sabía que con los años, aprendería a valorar mucho más haber crecido en una ciudad como Teruel, reencontrarme con viejos amigos y revivir esos momentos de inocencia absoluta.
Creo que haber crecido en una ciudad como esta, te da una gran lección de vida: luchar. Aún recuerdo como de más pequeña corría junto a mi mejor amiga por tener la primera fila de cualquier manifestación: el tren, la autovía Es cierto que muchas de esas reivindicaciones todavía continúan y que ahora, por vivir fuera no podemos ocupar ese primer puesto, pero el mensaje caló tan dentro de las dos que sabemos que hoy en día, pasemos lo que pasemos y aunque nos toque ser invisibles, tenemos que pelear para poder conseguir lo que nos propongamos, como cuando éramos pequeñas. Y así seguimos. Luchadoras como nadie y dejando por donde pasemos, el nombre de Teruel bien alto.
