PILAR 2011

Una noche entre tiritas y suturas en Interpeñas

Entre intoxicaciónes etílicas, contusiones, atenciones por agresiones y otros cuidados, los voluntarios de la DYA trabajan en el puesto sanitario avanzado de Interpeñas cada noche.

Una joven es ayuda por la DYA en Interpeñas
Una noche entre tiritas y suturas en Interpeñas
P.R.D

Noche del 11 al 12 de octubre, una de las más multitudinarias de las fiestas del Pilar. El recinto Interpeñas rebosa diversión y gente por los cuatro costados pero no todos han venido a divertirse. Es el caso de los 12 voluntarios de la sociación de Detente y Auxulia en Zaragoza (DYA) que conforman el puesto sanitario avanzado del recinto. “Somos profesionales, estamos preparados, tenemos mucha responsabilidad aunque vengamos de manera voluntaria”, expone Ángel Henández, coordinador y encargado de las Relaciones Externas DYA Zaragoza mientras se prepara para la actividad.


Desde las 23.00, el goteo de atenciones crece según pasan las horas. Antes de la media noche, las primeras intervenciones por pequeños cortes o lesiones leves. “Me he golpeado en la entrada de Interpeñas y me duele la mano”, indica uno de los primeros pacientes en entrar en el puesto. A continuación, otro herido reclama la atención sanitaria por las heridas que presenta tras caerse persiguendo a un autobús que cubría el trayecto hacia Interpeñas. Por otro lado, comienzan a aparecer los demandantes de protectores gástricos por malestar estomacal.


A partir de las 4.30, las atenciones por agresiones se multiplican y la seguridad del recinto con la ayuda de  varios efectivos de la Policía Nacional actúan para evitar males mayores. “Los agentes son nuestro ángel de la guarda, la coordinacion con ellos es genial y nos ayudan mucho”, agradece el responsable de la DYA ante el nerviosismo que generan las atenciones médicas entre los amigos de los pacientes.


Y es que cada noche, desde las 20.30 que comienzan su dispositivo hasta las 7.00, los voluntarios de la asociación y los dos médicos que los acompañan realizan una media de entre 50 y 60 atenciones de diversa índole y consideración dependiendo de “mucho” de los conciertos que toquen y la gente que acuda. “En los últimos años se ha mejorado mucho gracias a Pepe Castillo, presidente de la DYA en Zaragoza”, menciona el responsable de Relaciones Externas.

Atenciones más habituales

Lo más habitual son intoxicaciones etílicas, contusiones, caídas, agresiones aunque ocurren todo tipo de situaciones desde el que viene a pedir un etilómetro para ver si puede coger el coche o la que acude por que se le ha roto una uña y se le engancha en la ropa. “El viernes tuvimos que trasladar en ambulancia al Hospital Servet a dos personas por fractura de rodilla y tobillo”, comenta Ángel, un trayecto realizado en menos de 8 minutos.


“Aquí agilizamos el trabajo al hospital solucionado todo lo que podamos solucionar” realizando un servicio “preventivo” que libera de pacientes a las Urgencias , argumenta Ángel Hernández. “Somos un apoyo a la atención sanitaria”.


“Las intervenciones van por rachas”, al final de los conciertos y a partir de las 4. 00 ya que “los problemas comienzan a la 1.30 cuando entran los que no han venido a las actuaciones”, indica el responsale de Relaciones Externas de la DYA quién recuerda que el primer día en Interpeñas “fue un viernes caótico e infernal” por el volúmen de gente que asistió al recinto.


El puesto sanitario avanzado, especialmente diseñado para realizar labores de prevención en actos multitudinarios, tiene capacidad para varias atenciones simultáneas, dos ambulancias bien equipadas, tres camillas donde realizar curas, estabilizaciones, suturas, reanimaciones cardio pulmonares y una “jaima” donde los intoxicados descansan de sus excesos con el alcohol. “No podemos saber si viene drogado o muy bebido salvo que te lo digan sus acompañantes aunque puedes tener sospechas”, apostillan desde la DYA.


Entorno a las 7.00, el operativo de la DYA realiza el balance de la noche. Esta vez, el día 11 se saldó con más de 60 actuaciones entre las que destacaron un total de 11 heridos por agresión, 6 atendidos tras ser rociados con un spray de pimienta en la Carpa de la Máxima FM según relantan los afectados y 6 borracheras. En el caso de que sea menor de edad, se localiza automáticamente a sus familiares.“ Ha sido una noche rara y tranquila, apenas hemos tenido intoxicaciónes etílicas, la 'jaima' ha estado casi vacía”, argumenta el responsable de relaciones externas de la DYA.


“Funcionamos como un servicio sanitario e incluso tenemos que destacar más que los demás por que somos voluntarios”, defiende Ángel Hernández quién recuerda que DYA “no recibe ningún tipo de subvención” de ninguna administración. “Todos los voluntarios estamos en permanente formación y realizamos continuos cursos de primeros auxilios” por que “es una norma de la asociación”, apostilla sobre la profesionalidad de todos los voluntarios. “Si no compensara, no estaríamos aquí”, puntualiza.