LOTERÍA DE NAVIDAD

Consejos para un 'Gordo' sin disgustos

Décimos perdidos, compartidos, dañados, participaciones... Para tener que preocuparse solo de ingresar el premio en la cuenta es aconsejable seguir unas sencillas recomendaciones.

La Lotería de Navidad puede traer miles de euros a su cuenta corriente... pero también puede llegar acompañada de disgustos y encuentros en los tribunales. Décimos compartidos, participaciones, boletos dañados... El Sorteo Extraordinario del 22 de diciembre guarda mil y una historias detrás de los agraciados con el 'Gordo' descorchando champán.


Para tener que preocuparse solo de ingresar el premio en la cuenta, si a la suerte le da por hacer una visita, es aconsejable seguir unas sencillas recomendaciones.

Décimos a medias


Compartir décimos entre compañeros de trabajo, amigos y familiares es una costumbre muy arraigada. De hecho, un estudio realizado por el profesor Roberto Garvía en el año 2008 concluía que 3  de cada 4 españoles comparten décimos.


En este punto es importante recordar que los décimos de lotería son al portador, es decir, los cobra quien los tiene, no quienes los hayan comprado. Por eso, si de compartir boleto se trata, se aconseja hacer una fotocopia del mismo en la que firmen el portador y el resto de compradores, poniendo además las cantidades que juega cada uno.


Existen otras opciones, como firmar el décimo original por el reverso junto a los nombres de todos los jugadores y la cantidades que juegan; o realizar ante notario un documento en el que figuren todos los datos referidos anteriormente.


Cualquiera de estas fórmulas es perfectamente válida a la hora de reclamar en un juzgado la cantidad que nos corresponde de un décimo premiado, si el portador se niega a repartir el dinero.


No es nada raro que este tipo de casos lleguen a los tribunales. Uno de los últimos, y de los más llamativos, sucedió en Madrid. Una pareja de novios compró un décimo a medias que resultó premiado, pero entonces la relación ya había acabado. El novio se quedó con el décimo y lo cobró, mientras que la novia acudió a los tribunales a reclamar su parte.


El Tribunal Supremo creyó probado que el décimo había sido comprado a medias por la pareja y obligó al novio a dar la mitad del premio a la novia.

Participaciones


Si suele jugar a la lotería a través de participaciones, debe saber que Loterías y Apuestas del Estado no se encarga de abonar las cantidades premiadas en esta modalidad de juego. Es la emisora de las papeletas quien tiene que pagarle el dinero que le corresponda.


Para que la participación sea legal a todos los efectos, debe aparecer, visible, el número que juega, la serie, la fracción, la entidad o persona responsable de las papeletas y la cantidad que se juega.

Décimos dañados


Cada décimo se identifica no solo por el número, también por la fracción y la serie. Estos tres aspectos se repiten en varias ocasiones en el boleto y su identificación es la que determina el cobro. Si en un décimo, por muy dañado que esté, se identifican estas características, Loterías y Apuestas del Estado está obligada a abonar el importe del premio.


Eso sí, el pago no se recibirá en una administración de lotería, sino que a través de una de ellas el décimo será remitido a la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado para su evaluación, por lo que el proceso de cobro puede demorarse algún tiempo.


En 1995, una vecina de Hospitalet de Llobregat olvidó uno de los décimos de lotería que había comprado en una prenda de vestir que echó a lavar. Ese décimo resultó premiado en el Sorteo y aunque tras el centrifugado el billete de lotería quedó irreconocible, se extrajeron los datos identificativos del boleto y este fue cobrado.

Cobro de décimos y participaciones extraviadas


El reglamento de Loterías y Apuestas del Estado recoge que para el cobro de los premios es imprescindible presentar el décimo, pero esto es algo que han obviado los tribunales en varias ocasiones. Existen varias sentencias que han autorizado el cobro de premios sin que los billetes premiados se hayan presentado físicamente a la Administración.


En 2009, un grupo de amigos vieron como se acaban seis años de litigio cuando el Tribunal Supremo les reconoció que se les debía abonar el premio de un boleto de lotería que compraron y perdieron. En este caso fue un cupón de la ONCE, pero también existe jurisprudencia de este tipo relativa al Sorteo de Navidad.


Es el caso de una sentencia de la Audiencia Nacional publicada el pasado mes de septiembre. En ella, se condena a la Adminsitración de Loterías y Apuestas del Estado a abonar 300.000 euros a un hombre que compró tres décimos del 'Gordo' del año 2006 y extravió dos. El tribunal consideró probado que el hombre, quien denunció la desaparición nada más perderlos, había tenido los billetes en su poder e identificó los datos de los mismos.


Como en el caso de los décimos dañados, acreditar el número que se juega, la serie y la fracción es fundamental. De nuevo, el proceso de cobro será más lento, pero la jurisprudencia sobre este asunto puede ayudar a que se perciba la cantidad que corresponda.


Para curarse en salud, lo mejor es guardar los décimos en un lugar seguro y hacer fotocopias, tanto del anverso como del reverso.


Observando todas estas precauciones solo queda que la suerte tenga a bien acompañarnos.