Uno de los mayores espectáculos del mundo: los 100 metros lisos. Tal vez la prueba más emocionante del deporte. Sí, sucede en apenas diez segundos, pero está marcada en rojo por todo aficionado al atletismo. Ocho calles con los corredores más rápidos. Un pistoletazo de salida y la gloria a 100 metros.

En una de las calles centrales se encontrará un jamaicano de 25 años. No sale especialmente rápido. Su físico espigado – 1,90 metros de altura- tampoco ayuda nada más para la prueba. Sin embargo, su superioridad es la mayor de la historia. Sus marcas son estudiadas en los laboratorios y tal vez sea un atleta de otro tiempo. Lo realmente cierto es que Usain Bolt es el corredor más rápido de la tierra –a espera de datos en otros planetas-. Tiene un dominio apabullante de la disciplina y una velocidad impropia para un ser humano. El correr los 100 metros en menos de 9.58 segundos –actual récord del mundo- es su objetivo. Batirse a sí mismo.

La de hoy –a las 22.50- es una cita imposible de olvidar que en menos de diez segundos concluye y erige a un nuevo hombre como el más rápido y oro olímpico. Una competición donde el más mínimo fallo te elimina para la gloria. En la que las décimas de segundo son el mayor enemigo.

Sí, el jamaicano es el favorito. Londres debería aparecer en su lista de pistas conquistadas. Pero lo imprevisible de la prueba hace que Powell –también jamaicano- o Gay opten un cetro que Usain no está dispuesto a ceder. Es más, quiere ampliar su leyenda batiendo un nuevo récord del mundo. O lo que es lo mismo, desafiando de nuevo a las leyes físicas y a la historia del deporte.

Amenaza lluvia

La meteorología siempre caprichosa quiere ponerle más pimienta a una prueba de por sí explosiva. La posibilidad de que llueva en el tartán del estadio olímpico de Londres podría 'aguar la fiesta' –nunca mejor dicho- u otorgar el toque épico a la prueba.

A las 20.45 las semifinales

Poco antes, a las 20.45, tendrán lugar las semifinales donde todos lucharán por estar cerca de Bolt para ver como vuela con sus largas piernas y estéticos movimientos. Como roza con rapidez la pista para comenzar otra nueva zancada. Como levanta a 80.000 personas de sus butacas –llueva o no-.

Bolt, el enemigo a batir

Bolt es el favorito. Pero existe otra posibilidad, la de demostrar que el jamaicano es humano ya que puede tener un mal día. Es otra posibilidad que buscan Tyson Gay, Blake, Powell o Gatlin y que daría la razón a la ciencia. La que atestiguaría que Bolt no es extraterreste.

Pero tal vez la posibilidad más plausible sea que el espigado atleta jamaicano haga su postura del arquero, sonría a la cámara y haga muecas. Todo esto antes de la prueba. Una vez escuche el pistoletazo de salida volará. Correrá más que nadie con una sola idea en la cabeza. Llegar a la meta para seguir haciendo muecas, sonriendo y saludando al público junto al marcador que le muestre como nuevo recordman mundial o con la medalla de oro al cuello.

Prepárense para el espectáculo de los 100 metros lisos.