En ocasiones la inspiración llega tras horas de trabajo. Otras veces, llega a través de una experiencia, buena o mala. Hay artistas que aprovechan sus propias vivencias para componer, consiguiendo así transmitir emociones sobre situaciones reales, que generan empatía en su público. Por ejemplo, ¿quién no ha sentido alguna vez lo que cuenta la canción del ganador de Eurovisión de 2017?

Y también hay, escondidas entre los versos de canciones, historias que nadie confirma ni desmiente, que se desconoce si son ciertas, y que acaban siendo leyendas urbanas, fábulas, hipótesis y rumores, sobre si el artista realmente vivió algo parecido, sobre amores perdidos o hallados y un largo etcétera.

Estas ocho canciones tienen una historia detrás. Algunas oficial, otras sin confirmar, pero todas consiguen una carga emocional diferente, porque son situaciones reales o factibles en las que el público puede verse reflejado. 

Ocho canciones con historia

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