Derecho, ¿una carrera vigente en la actualidad?
A pesar de ser una de las más longevas, la tecnología y las relaciones a nivel global han conseguido que estudiar Derecho esté de plena actualidad.
La cantidad de situaciones a lo largo de nuestra vida en las que debemos recurrir a los profesionales del derecho son más numerosas y cotidianas de lo que somos conscientes. No se trata solo de acudir al despacho de un abogado; sino que estamos disfrutando de su trabajo cuando aceptamos los términos y condiciones legales de un servicio, cuando devolvemos un producto, al comprar una casa, al aceptar la política de cookies en una página web... el derecho está presente en nuestro día a día, siendo la base de nuestra sociedad.
También nos cruzamos con esta disciplina de forma permanente a través de la televisión. Bien sea a través de la actualidad, con la crisis de los refugiados o los 'papeles de Panamá'; bien a través de series de éxito como 'How to get away with murder', 'C.S. I.', 'The Good Wife', 'Scandal'... aunque, en estos ejemplos, un halo de misterio y poder suele envolver a los representantes del mundo de la legalidad, que nos plantean su trabajo como un entramado difícil y ajeno a la vida cotidiana del resto de seres humanos. Una situación alejada de la realidad.
¿Qué es lo que ha conseguido que unos estudios longevos estén, en el siglo XXI, de plena actualidad? Que el Derecho es la base de nuestra sociedad y, en una época con tantos cambios como la actual, los juristas son absolutamente necesarios.
En el mundo de la empresa privada queda muy claro: "La carrera de Derecho está de plena actualidad, no hay más que tomar como referencia a Estados Unidos, un país donde empresa y derecho son una realidad indisociable», explica Juan Luis Falcón, socio director de Garrigues en Zaragoza y reponsable del grupo de Empresa Familiar. Al otro lado del océano, "los abogados están en la primera línea de las empresas a la hora de tomar decisiones, porque se encargan de analizar los impactos legales de cada una de estas apuestas. Cada vez que una empresa actúa, lo hace con el conocimiento y la aprobación de su asesoría jurídica», afirma. Por eso, desde su punto de vista, es indispensable que los abogados actuales tengan una mentalidad global activa. "Además, se están desarrollando campos nuevos en los que el papel de los especialistas en derecho es vital. Es el caso, por ejemplo, de las empresas tecnológicas o biotecnológicas", añade.
Para Marta Rivas, Compliance Officer de la empresa BSH Electrodomésticos, estudiar Derecho es algo tan necesario en la actualidad que está convencida de que muchos jóvenes orientarán su profesión hacia temas relacionados con esta disciplina. "De cara al futuro y, además de optar a las salidas profesionales quizá más conocidas, como trabajar en un despacho, opositar a una plaza para la Administración Pública, dedicación a la vida académica o servicios de traducción jurídica, creo que las dobles titulaciones resultarán especialmente interesantes para aquellos que prefieran desarrollarse como profesionales en el ámbito empresarial, en organizaciones internacionales o en organismos de la Unión Europea", afirma.
Porque, además de resultar útil y contar con múltiples opciones de incoporación al mundo laboral, tal y como afirma Alberto Herrero de la Fuente, catedrático emérito de Derecho internacional de la Universidad de Valladolid, y catedrático 'Jean Monnet': "El mundo del futuro será tanto mejor cuantas más personas se formen en Derecho". Herrero de la Fuente incluso afirma que "un conocimiento suficiente del derecho internacional por un cada vez mayor número de universitarios rendirá, sin duda, frutos en cuanto al aprecio por la justicia, la paz, la concordia y el arreglo de las controversias internacionales por medios pacíficos».
Además, el catedrático señala que los avances actuales de la ciencia y la tecnología "son de tal calado" y se llevan a cabo con tal rapidez que, "junto a la amenaza del terrorismo global, podría desembocar en una pérdida irreparable de las libertades, inherentes a la dignidad de la persona humana". Es decir, necesitamos juristas para que, en un futuro, podamos seguir siendo seres humanos con dignidad.
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