El eterno secundario que por fin salió a escena

Alfredo Pérez Rubalcaba, candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, lleva metido en política desde sus tiempos universitarios. Esta es la primera vez que es el actor principal.

Alfredo Pérez Rubalcaba
El eterno secundario que por fin salió a escena
EFE

Treinta años le han hecho falta a Alfredo Pérez Rubalcaba (Solares, Cantabria, 1951) para ser la cabeza visible del PSOE, partido en el que milita desde el año 1974. El cántabro fue uno de los hombres fuertes de los gobiernos de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, pero nunca había pasado de la segunda línea de guerra hasta finales de mayo de 2011, cuando el Comité Federal del PSOE puso en él todas sus esperanzas para salvar las urnas el 20-N.


Tres veces ministro, dos portavoz del Gobierno, una vicepresidente del Ejecutivo, portavoz del Grupo Socialista en el Congreso y director general de Educación, Rubalcaba lo ha sido casi todo en política desde que en la década de los 70 comenzó en lo más bajo del PSOE, pegando carteles por las calles de Madrid.


Casado y sin hijos, Rubalcaba es Doctor en Ciencias Químicas por la Universidad Complutense de Madrid. Idéntica formación posee su esposa, Pilar Goya, quien actualmente es profesora de investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Ambos se conocieron en su etapa de estudiantes y se casaron hace más de 30 años.


El candidato socialista llegó a obtener la plaza de profesor titular de Química Orgánica en la Universidad Complutense, en la misma facultad en la que había estudiado, pero pronto su camino se orientó de la docencia a la política, en la que lleva desde al año 1982.


Conocida es su pasión por el deporte. En sus años universitarios despuntó como velocista llegando a correr los 100 metros en menos de 11 segundos. Una lesión se llevó por delante su carrera como deportista de élite, pero el atletismo sigue siendo uno de sus deportes favoritos junto al fútbol.


'Pelea por lo que quieres' ha sido el lema de campaña de Rubalcaba, una campaña descafeinada en la que todas las encuestas, tanto las oficiales como las oficiosas, han dado ganador al candidato del PP, Mariano Rajoy. Ambos solo han tenido un 'cara a cara' que estuvo centrado en la crisis económica y financiera en el que se llevó la victoria el líder popular.


"Tenemos la necesidad de realizar un gran empeño nacional para recuperar nuestra economía, para crear empleo, para tratar de juntar todas nuestras fuerzas en torno a la salida de la crisis", dice en uno de sus apartados la web del candidato socialista, que no se ha 'arrugado' en ningún momento de la campaña a pesar del descalabrado socialista que se augura este domingo.