"Hay un interés social por acercarse a la discapacidad, pero nos queda muchísimo por hacer"

La web de Araprode, que nació para cubrir las necesidades de estas familias, fue la mejor web de ONG en la primera edición de los Premios Aragón en la Red.

Varias de las familias que componen la asociación aragonesa Araprode en una fotografía de grupo.
Varias de las familias que componen la asociación aragonesa Araprode en una fotografía de grupo.

Ser una ayuda más para las personas con discapacidad y sus familias y vencer el desconocimiento que para muchos todavía entraña este "complicado mundo". Esos son dos de los objetivos que persigue la Asociación Aragonesa Prodesarrollo Psicomotor del Niño (Araprode), cuya página se convirtió el año pasado en la mejor web de ONG en los I Premios Aragón en la Red.


"Internet y las redes sociales -explica su presidenta, Luisa Roco- cumplen un papel muy importante a la hora de dar a conocer el mundo de la discapacidad". El transcurso, sin embargo, no ha sido fácil; y han sido varias las luchas que un grupo de padres unidos han tenido que liderar desde que fundaran la asociación hace más de 10 años. "La primera lucha fue saber dónde podíamos acudir, porque hay aspectos de la discapacidad que están un poco desatendidos", relata Luisa. 


Entonces eran apenas cuatro familias con niños con discapacidad motora. Hoy son más de 22 las que continúan luchando por vencer las barreras arquitectónicas y mejorar la calidad de vida de estas personas. "Nuestro mundo es muy duro porque son niños que siempre tienen que depender de una segunda persona y hay logros que han sido muy complicados", subraya Roco.


Pese a todo, diez años después, la asociación puede presumir de diversas mejoras que no habrían sido posibles sin la implicación social de las familias. "Cuando los chicos fueron crecieron, creamos campamentos de verano para niños con necesidades especiales y estuvieron funcionando tres o cuatro años hasta que la administración se dio cuenta de que los podía incorporar a su oferta de campamentos de verano", recuerda la presidenta de Araprode. 


La hipoterapia y la hidroterapia -cuyo beneficio para las personas con discapacidad avalan numerosos estudios clínicos- han sido algunos de los avances que la asociación ha incorporado para sus niños con el paso del tiempo. Así, a través de las AMPAS -explica Luisa- se consiguió que los caballos fueran a los colegios y se organizaron campamentos de hipoterapia e integración para estos niños. "El nexo común era el caballo, pero en la práctica conseguíamos también la integración con chicos sin problemas", recalca Roco. 


En la actualidad, esta asociación aragonesa realiza también "campamentos de respiro familiar", que suelen celebrarse dos veces al año -coincidiendo con primavera y otoño- en el Camping Zaragoza, con el objetivo de brindar también un "respiro" a los padres, "para que no se resientan las familias", matiza Luisa. 

Las redes sociales: una ayuda para darse a conocer

Las redes sociales son hoy el principal aliado de esta asociación aragonesa en su lucha por seguir incorporando mejoras para las personas con discapacidad y sus familias. "Muchas veces nos encontramos con que hay recursos en la sociedad que a veces son desconocidos o que se podrían potenciar, pero necesitan de la reivindicación de las familias para que la Administración sea sensible y adopte esas medidas", comenta.


Así surgió la idea de crear la página web premiada y dinamizar su contenido y otras actividades que realizan a través de las redes sociales, con el objetivo de intentar que esos primeros diagnósticos que reciben los padres sean mucho menos confusos. "Las familias muchas veces no saben dónde tirar y si involucramos a la sociedad, participando pediatras y padres, podemos ayudar mucho a los que empiezan de cero", defiende Luisa.


El interés social, la solidaridad y el reconocimiento hacen el resto, aunque en este terreno -matiza- todavía quedan barreras por romper y "muchísimas cosas" por hacer. 


"Uno de los problemas que tiene la discapacidad es que es muy individual y especifica. Algunos de nuestros niños han participado en proyectos de la Universidad, pero luego de esa necesidad de uno se pueden servir tres. Los descubrimientos en este mundo son lentos y poco rentables, por eso nuestro esfuerzo se centra en intentar buscar medios de financiación para que esos avances salgan adelante", concluye Luisa.


Más información de los Premios Aragón en la Red.

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